La fiebre por el fútbol femenino en España se ha desatado y ya no hay quien la pare. La histórica consecución del Mundial absoluto cambiará para siempre el concepto del balompié nacional, pero lo que está claro es que este brillante éxito no es ni mucho menos fruto de un día sino que es la consecuencia de un trabajo incesante que se viene realizando durante años.
El triunfo de las de Jorge Vilda es tan sólo la guinda del pastel, el máximo exponente de un método que se viene desarrollando desde hace tiempo en las categorías inferiores de la selección española. Es la forma final de enseñarle al mundo que el fútbol español está en la cúspide y que se ha convertido por méritos propios en el faro planetario.
El conseguido en Australia y Nueva Zelanda se trata del cuarto Mundial que consigue España en el fútbol femenino. Anteriormente, las selecciones sub20 y sub17 ya habían marcado el camino y además en aquellos equipos estaban algunas de las futbolistas que ahora han conseguido el trono en la categoría absoluta, como Salma Paralluelo.
La victoria ajustada y sufrida ante Inglaterra desató las emociones de una forma increíble en la expedición española y también en la Federación. No era para menos, la apuesta por el fútbol femenino desde hace tiempo es total y ahora ha dado sus frutos ante los ojos de todo el mundo.
Campeonas sub17 y sub20
El primer título mundial para España en las categorías inferiores llegó hace cinco años. La selección sub17 se plantó en el Mundial de Uruguay dispuesta a dar la campanada y su convicción se tradujo en un éxito absoluto. En aquel equipo ya brillaba una jovencísima Salma Paralluelo, la única futbolista que puede presumir de haber sido campeona del mundo en todas las categorías. Leyenda.
España llegó a la final con México como rival a batir. Otras conocidas del equipo absoluto que acaban de ser campeonas del mundo en Australia como Cata Coll y Eva Navarro también estaban en aquella plantilla.
Claudia Pina inauguró el marcador cuando tan sólo se habían disputado quince minutos de partido, pero no se quedó ahí la gran actuación de la española, la máxima goleadora de aquel Mundial. En el ecuador del primer acto apareció para hacer el segundo tanto del choque y encarrilar de esta manera el título para la selección sub17, el primer Mundial femenino para España.
Aquella gesta del equipo sub17 se repitió cuatro años después. La anterior generación ya había marcado el camino del éxito y a partir de ahí todo fue más 'sencillo', porque a España ya se le había insertado el gen ganador en su ADN. España llegó al Mundial sub17 de 2022 en la India defendiendo su condición de campeona, ya que el evento de 2020 se había cancelado por la pandemia, y no falló.
Las españolas llegaron a la final ante Colombia y ahí revalidaron su título. Un gol en propia puerta de las sudamericanas a falta de 8 minutos para llegar el 90 decantó el choque y sumó un nuevo entorchado mundial para el fútbol español.
Un poco más 'arriba', en la categoría sub20, también 2022 fue un año mágico para la Selección. España fue la mejor en aquel Mundial de Costa Rica y la estrella de la final fue nada más y nada menos que Salma Paralluelo.
Dos goles de la que ahora también es campeona del mundo absoluta fueron decisivos, junto al tanto de Inma Gabarro, para certificar la victoria por 3-1 en la final ante Japón. Ese oro venía a confirmar que la línea de trabajo que unos años antes había empezado en las categorías inferiores de la Selección iba por el buen camino.
España domina el fútbol
El triunfo de la selección absoluta en el Mundial de Australia y Nueva Zelanda no es sino la confirmación de que España manda ahora mismo sin discusión en el fútbol femenino. Nadie puede negar la evidencia, nuestro balompié es la mayor potencia del planeta y eso lo dicen los títulos.
España es, después del último éxito de las de Jorge Vilda, la vigente campeona del mundo en categoría sub17, sub20 y Absoluta. No hay nadie que se atreva a toser a los equipos españoles y no se recuerda un dominio así por parte de nuestro país en un deporte desde hace tiempo.
Olga Carmona, Salma Paralluelo, Jennifer Hermoso, Alexia Putellas, Alba Redondo, Aitana Bonmatí... son muchos los nombres, también los del cuerpo técnico que ha orientado a las futbolistas, que quedarán para la historia del deporte femenino español y que ya pueden presumir de ser campeonas del mundo.