El presidente de la Federación Española de Fútbol, Luis Rubiales, ha unido en su contra a la derecha y la izquierda del país. Las críticas por su beso a Jenni Hermoso y otras de sus actitudes tras la final del Mundial femenino siguen un día después de las celebraciones por el título.
La portavoz del PP en el Congreso, Cuca Gamarra, ha calificado de "bochornosa" la actitud de Rubiales. Por su parte, la delegada del Gobierno por la violencia de Género, Victoria Rosell, ha señalado que el beso "sería constitutivo de delito" en España.
Victoria Rosell, en una entrevista en Catalunya Ràdio, ha explicado que para considerar el beso delito, según la ley, simplemente se requiere que la víctima o el agresor sea español y que este último se encuentre en el país: "Todo eso se da en este caso, así que sería perseguible". El delito no prescribiría hasta los cinco años, por lo que pide evitar la "presión" sobre la futbolista.
Rosell apeló a la responsabilidad social de las entidades públicas, privadas y las empresas patrocinadoras para destituir a Rubiales de su cargo. "Ojalá de verdad no hubiera acudido a Moncloa, no acuda a Zarzuela y demostremos el país feminista que somos", dijo Rosell. También pidió "dejar de poner el acento en las víctimas como las provocadoras de su propia protección" y generar más confianza en las instituciones para no dar altavoz, textualmente, a las voces negacionistas.
Gamarra, por su lado, ha pedido aplazar las posibles consecuencias sobre Rubiales que pueda provocar el beso para no "ensombrecer" el éxito de la Selección. "Un eje fundamental debe de ser el respeto a las mujeres y lo que vimos fue bochornoso, pero quiero destacar lo que han conseguido", dijo en rueda de prensa en el Congreso tras firmar el PP y Coalición Canaria la agenda canaria.
Insitió en que ya habrá tiempo de analizar las consecuencias y las medidas que se puedan plantear sobre Rubiales "porque lo que no está bien hecho siempre tiene que tener consecuencias, sobre todo, si ha indignado a todo un país" y perjudica la "buena imagen" de España.
La visita a La Moncloa
Luis Rubiales acudió este martes a primera hora junto con las jugadoras y el cuerpo técnico de la Selección a la recepción en La Moncloa a las campeonas del mundo. El presidente de la RFEF dejó una de las imágenes destacadas por el frío saludo que le brindó el presidente en funciones Pedro Sánchez y mantuvo un perfil bajo durante todo el acto.
Los reyes Felipe VI y Letizia también recibirán a la Selección en La Zarzuela, pero no será hasta el próximo 19 de septiembre. Rubiales también está en la picota por otro gesto realizado en la celebración del Mundial, en el palco del estadio donde se jugó el partido, tras llevarse eufóricamente una mano a sus partes íntimas teniendo al lado a Doña Letizia y la Infanta Sofía.