El Mundial de 2030m, que albergarán en conjunto España, Portugal y Marruecos, no conocerá las sedes donde se disputarán los partidos de forma oficial hasta 2026. Eso sí, todos los posibles candidatos se han puesto en marcha para remodelar y reconstruir sus estadios, y así ser lo más atractivos posibles de cara a la elección final.
En un principio el torneo internacional se jugará utilizando entre 18 y 20 sedes mundialistas, que dependiendo del criterio que establezca finalmente la FIFA, se repartirán de la siguiente manera: tres estadios de fútbol para Portugal, seis para Marruecos y los nueve u once restantes serán las sedes que tenga España.
Entre estos, Marruecos presentará como su joya más fuerte un megaestadio de fútbol, posiblemente el que se convierta en el más grande del mundo, que aún no ha empezado su construcción: Estadio Hassan II de Casablanca.
A principios de julio de este año fue presentado por Fouzi Lekjaa, presidente del Comité de la Copa Mundial, y el ministro del Interior, Abdelouafi Laftitl, el diseño innovador del nuevo estadio Hassan II en la ciudad de Benslimane, a las afueras de Casablanca, donde se construirá el feudo.
Sobre una superficie de 100 hectáreas, se erigirá un campo de fútbol con un diseño único que recuerda a las grandes carpas o jaimas tradicionales de Marruecos y que tendrá una capacidad para 115.000 personas. Hasta ahora, el estadio más grande de la historia del fútbol.
El terreno de juego de hierba homologado por la FIFA, estará rodeado por cuatro graderías cubiertas. Además, habrá instalaciones auxiliares para atletas y jugadores, otras para operadores y organizadores, y por último para los espectadores (aseos, restauración...).
El proyecto ha sido diseñado por el estudio de arquitectura estadounidense Populous en colaboración con la firma franco-marroquí Oulalous + Choi (O+C). El primero es un estudio con una amplia experiencia que ha trabajado ya en más de 2.500 proyectos, entre ellos estadios de fútbol y rugby como el feudo principal de los Juegos Olímpicos de Londres 2012, por los que ha ingresado más de 40.000 millones de dólares.
La lucha por la final
La FIFA exige que el estadio que albergue la final de un Mundial tenga una capacidad mínima de 80.000 espectadores, y Marruecos con su nuevo proyecto del estadio Hassan II cumple con los requisitos. Sueñan con ser sede de la final 2030.
Sin embargo, en España el Santiago Bernabéu, que está en proceso de remodelación, y el Camp Nou, que se reinaugurará en junio de 2026, son fuertes candidatos y grandes rivales en la carrera por el honor a la gran final.
La FIFA anunciará oficialmente la sede en el segundo semestre de 2024. Aunque, según el medio Marca, no existen dudas. Será el Bernabéu quien albergue la final del Mundial 2030, gracias en parte a las buenas relaciones existentes entre el estadio y la FIFA.
Lo que sí está claro es que Hassan II será anfitrión de la Copa África femenina en 2024 y la masculina en 2025, y posiblemente el Mundial de Clubes en 2029.