La Selección de los 2000: diez nacidos en el siglo XXI toman el mando del vestuario de Luis de la Fuente
- La inclusión de Cubarsí a última hora, en sustitución de Pau Torres, eleva la cifra de los jugadores jóvenes en la Selección.
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Una nueva generación se ha abierto camino en la Selección, sobre todo, a partir del Mundial de 2022 y la llegada de Luis de la Fuente al banquillo. Ya fue parte vital en el triunfo en la pasada Eurocopa y ahora coge mayor relevancia, tanto en número como en peso dentro del equipo. Los nacidos a partir del año 2000 toman el mando en el combinado español.
Ya en convocatorias recientes se habían hecho notar, con presencia de seis o siete de ellos en cada lista. A la Eurocopa de Alemania, por ejemplo, fueron seis: Ferran Torres (2000), Álex Baena (2001), Pedri y Nico Williams (2002), Fermín López (2003) y Lamine Yamal (2007). Ese número no ha dejado de crecer, hasta la convocatoria de este parón de noviembre que alcanza una cifra récord.
La inclusión a última hora de Pau Cubarsí (2007) en reemplazo de su tocayo Pau Torres, lesionado, lleva la cuenta a un total de diez. Además, los tres internacionales que se estrenan en la Absoluta han nacido más allá del 2000: Aitor Paredes (2000), Marc Casadó (2003) y Samu Omorodion (2004). Estos se suman a los mencionados Baena, Pedri, Nico y Lamine, aunque este fue desconvocado por lesión dejando también su hueco a un jugador de su generación: Bryan Gil (2001). Bryan Zaragoza (2001) y Yeremy Pino (2002), que ya tienen experiencia en la Selección, completan la lista.
El grupo de jóvenes va ganando presencia en cada convocatoria de De la Fuente, y no hay que olvidar a los que se han quedado fuera de esta lista de noviembre, pero están en los planes del seleccionados. Como un Gavi (2004) que todavía va poco a poco tras recuperarse de su grave lesión sufrida con España hace un año o Alejandro Balde (2003), que también pasó por su propio calvario de lesiones y aún busca su mejor nivel.
Las de Lamine y Fermín son las otras 'bajas' de este parón junto a Ferran y otros nacidos en este siglo XXI que han debutado en la Selección, como Oihan Sancet (2000) y Ansu Fati (2002). Por tanto, es de esperar que más pronto que tarde el número de jugadores naciendo en los 2000 siga elevándose, también por la llamada a 'nuevos' futbolistas que tocan a la puerta como Miguel Gutiérrez.
El once del futuro
El recambio está asegurado, prácticamente en cada posición. En defensa, por ejemplo, hay dos centrales (Cubarsí y Paredes) y un lateral izquierdo (Balde) que ya han hecho acto de presencia en la Selección. Faltaría un lateral diestro, aunque el sevillista Juanlu Sánchez (2003). En la portería el proceso va más lento, aunque los Arnau Tenas, Joan García o Julen Agirrezabala ya van haciendo 'ruido'.
En el centro del campo, qué decir. Pedri y Gavi son intocables en esta Selección cuando están disponibles, mientras que Casadó irrumpe ahora como lo ha hecho en el Barça. Yéndonos a perfiles más ofensivos tampoco faltan efectivos, con jugadores como Baena, Fermín o Sancet que pueden ocupar la mediapunta.
Y en la delantera hay dos frentes casi opuestos. En los extremos, España ya cuenta con dos futbolistas de máximo nivel —como se comprobó en la Eurocopa— que son Lamine y Nico. Además, todas las alternativas que se encuentran en sus posiciones son de su generación: Bryan Gil, Bryan Zaragoza y Yeremy Pino.
Pero si de extremos jóvenes va sobrada la Selección, no tanto en la posición de '9'. Ahora le llega a Samu Omorodion —que a partir de ahora quiere ser conocido con su apeellido materna, Aghehowa— la oportunidad de hacer el puesto suyo de cara a la próxima década. Antes, los Ferran o Ansu Fati, para los que esa no es su posición natural total, no cuajaron ahí. Por detrás, el que más ruido está haciendo es Marc Guiu, que ya marca goles con el Chelsea.