Lucas Hernández tendrá que comparecer junto a su pareja el próximo 21 de febrero a las 11:30 en el juzgado número 35 de Madrid para declarar sobre la pelea que mantuvo con su novia hace unos días y por la que se le acusó de una agresión machista.
El problema es que el Atlético disputa nueve horas más tarde (20:45) el partido de ida de octavos de final de la Champions ante el Bayer Leverkusen, por lo que el abogado de Lucas ya había solicitado el aplazamiento de la vista, un recurso que el juez ha denegado al fijar la fecha para su declaración.
A pesar de que esta vista no debería impedirle estar en el once inicial del Atlético -si Simeone así lo estima-, lo cierto es que dispondrá de muy poco tiempo para viajar desde Madrid a Leverkusen, un trayecto que podría ocuparle más de cinco horas.
Considerando que no hay vuelos comerciales directos desde Madrid a Leverkusen, el único avión que podría tomar el jugador es a la vecina Düsseldorf, con una duración estimada de entre dos horas y media y tres horas. A eso habría que sumarle casi otra hora del trayaecto entre Düsseldorf y Leverkusen.
Y todo ello considerando que Lucas tardase poco tiempo en declarar y llegase pronto al aeropuerto de Barajas. Por todo ello, el abogado de Lucas había solicitado el aplazamiento de una vista a la que tendrá acudir y por la que casi con total seguridad se perderá un partido tan importante como el del Leverkusen. Una baja sensible para el Atlético, ya que Godín apura los plazos de la recuperación de su lesión para llegar a tiempo.
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