El Mónaco llega a la vuelta de los octavos de final de la Liga de Campeones contra el Manchester City sin la presión de ser el favorito, con la tarea de levantar un marcador adverso (5-3), pero con las esperanzas de todos sus seguidores.
Consciente del poderío del rival que tendrá enfrente, el conjunto monegasco no olvida la tradicional fragilidad del Manchester City en competiciones europeas.
De la mano de la gran revelación del año en el fútbol francés, Mbappé, y con la presencia amenazadora en la delantera del colombiano Falcao, los del Principado ponen todo el énfasis en marcar el primer gol, ya que consideran que si eso se da, la eliminatoria se pondría muy favorable.
Pese a que Falcao sufrió un golpe en la cadera derecha en el partido el pasado sábado ante el Girondins de Burdeos, se espera que sea de la partida. Si al final no puede jugar de inicio, Mbappé compartirá delantera con Germain, como lo ha hecho en los cuatro últimos partidos del Mónaco.
Al margen de Guido Carrillo, operado de los aductores la semana pasada, y de Boschilia, baja para toda la temporada, Jardim tiene a todos sus jugadores sanos para jugar.
Sin embargo, deberá reemplazar al sancionado central Glik por el italiano Raggi, que se alineará en la zaga junto al prometedor brasileño Jemerson.
También parece que el mediocampista Tiemoué Bakayoko podrá ser alineado desde el comienzo, pero si no es el caso, el portugués Moutinho, que marcó un golazo en la ida, tendrá su oportunidad.
El Manchester City, por su parte, parece haber dejado de lado las deficiencias defensivas que evidenció en la primera mitad de temporada y llega al Principado en su mejor momento, con 11 partidos sin perder en todas las competiciones y con su portería a cero en los tres últimos.
El equipo de Pep Guardiola cuenta con la ventaja engañosa del 5-3 del encuentro loco de la ida y sabedor de la necesidad de ver portería ante un equipo tan ofensivo como es el Mónaco.
Sin embargo, el preparador catalán, que afronta su partido número 100 en la Liga de Campeones, podría apostar por un once ligeramente más defensivo del que puso en liza el pasado fin de semana en la FA Cup frente al Middlesbrough (victoria 0-2).
De Bruyne podría dejar su sitio en el centro del campo a Fernandinho, quien formaría en el doble pivote junto a Yaya Touré, mientras que serían Silva, Sané, Sterling y Agüero los que llevarían el peso ofensivo.
Además, Willy Caballero, que en el partido de ida le detuvo un penalti a Falcao García, recuperará su sitio en el once después de descansar en Copa, por lo que el chileno Claudio Bravo volverá al banquillo.