El delantero galo llega a la cita con mucha hambre, pero también con cierta sed de venganza. En sus retinas todavía queda lo ocurrido hace tres años. Ese momento en el que Yan Sommer le detuvo una pena máxima en una tanda de penaltis que provocó la eliminación 'bleu' de la Eurocopa. Un duro varapalo para Kylian ya que su lanzamiento fue el definitivo.

Mbappé tiene la espina clavada y eso le hace ser mucho más peligroso si cabe. Con la "conciencia más tranquila" y con la obligación de demostrar después de su discreto papel en la Champions con el PSG, el genio de Bondy afronta la Eurocopa convencido de guiar a los suyos hacia el éxito.

El delantero francés estará listo para el debut frente a Austria. A pesar de las molestias en la rodilla y en la espalda surgidas en los últimos compromisos amistosos, Mbappé está listo para la batalla. Deschamps le ha dosificado en los últimos días con el objetivo de que llegue al estreno en la mejor forma física posible. 

Asignatura pendiente

Kylian Mbappé buscará en esta Eurocopa algo inédito para él. Y es que todavía no sabe lo que es ver puerta en este torneo. Bien es cierto que a sus espaldas solo tiene una edición de Euro en la que disputó cuatro partidos, pero es muy extraño que aún así siempre se haya ido de vacío.

Además, resulta más chocante si cabe teniendo en cuenta los espectaculares números que tiene en Mundiales. Y es que Mbappé suma ya 12 goles en Copa del Mundo con tan solo 14 encuentros jugados. Una salvajada.

Kylian Mbappé con la copa del mundo. REUTERS

En el Mundial de Rusia 2018, con 20 años, marcó cuatro goles. Un torneo en el que destacó su exhibición portentosa frente a Argentina en los octavos de final. Cuatro años más tarde, precisamente ante la selección albiceleste, Mbappé realizó una de las mejores actuaciones individuales que se recuerdan en una Copa del Mundo.

Un partido excelso ante los ojos de todo el mundo y que se produjo en la mismísima final del torneo. Él solo acudió al rescate de Francia para igualar a dos un partido en el que los galos estaban siendo muy superados. Llevó la final a la prórroga y allí volvió a sacar las castañas del fuego a su equipo al igualar un nuevo gol de Messi. En la tanda, que acabó con el sueño francés, Kylian no falló en su lanzamiento desde los once metros.

Recuperar el trono

Kylian Mbappé tendrá la presión de ofrecer un gran nivel en la Eurocopa, pero lo mismo ocurre con la selección francesa. El combinado dirigido por Didier Deschamps necesita resarcirse de lo ocurrido en la última edición del torneo y buscará volver a levantar el título 24 años después.

Mucho ha llovido desde que Francia lograra su segunda y última Eurocopa. Ocurrió en el 2000 con un equipo lleno de estrellas como Henry, Zidane, Vieira, Desailly o el propio Deschamps. Desde entonces, los galos han disputado cinco ediciones más del torneo quedándose a las puertas del título en 2016 donde perdieron la final en su país frente a la Portugal de Cristiano Ronaldo.

A esta Euro llegan con la clara vitola de favoritos. No es para menos después de ser los actuales subcampeones del mundo y contar en sus filas con varios de los mejores jugadores del planeta en su puesto.

Maignan será el encargado de desbaratar cualquier disparo de los delanteros rivales. El guardameta del Milan se ha consolidado como relevo de Lloris y es toda una garantía bajo los palos de la selección francesa. Estará protegido también por una defensa de quilates. Un lateral izquierdo en el que tanto Théo Hernández como Ferland Mendy pueden aportar muchísimo, una pareja de centrales compuesta por Saliba y Upamecano, dos muros, y un lateral derecho en el que Kounde dará equilibrio a su equipo.

La selección francesa, durante un amistoso antes de la Eurocopa. REUTERS

En la zona del centro del campo se prevé un doble pivote muy físico. Ante la ausencia por lesión de Tchouaméni para el debut ante Austria, lo lógico es que Deschamps forme con Kanté y Camavinga. Habrá que ver que ocurre con Rabiot, un fijo en los esquemas del seleccionador. 

Por delante llega la guinda del pastel. Cuatro jugadores ofensivos que intentarán guiar a Francia hacia la tercera Eurocopa de su historia. Griezmann será el enganche entre la delantera y el centro del campo, mientras que Dembélé, Mbappé y Giroud tendrán la labor de perforar las porterías rivales.