Tan solo ocho meses separaron los nombramientos de Luis de la Fuente y Luciano Spalletti como seleccionadores de España e Italia, respectivamente. Uno llegó al cargo por la 'patada' a Luis Enrique tras el Mundial de Qatar y otro por la 'vendida' de Roberto Mancini que prefirió los millones de Arabia Saudí a menos de un año de la Eurocopa.
No hay demasiadas diferencias entre estas dos selecciones que se enfrentan este jueves en la ciudad de Gelsenkirchen (21:00 horas). Sin un crack mundial a lo Kylian Mbappé en Francia o Jude Bellingham en Inglaterra, España e Italia son dos bloques. A tener en cuenta, en ambos casos, la juventud: Italia y España ocupan los puestos 6 y 11 entre los 24 equipos de la Euro según las medias de edades más bajas.
En diez meses, Spalletti ha cambiado el registro de la Azzurra. A esta Italia le gusta tener el balón, lo cual es llamativo dado que España perdió la posesión ante Croacia (46%) tras 111 partidos ganándola. En los últimos días, Luciano ha repetido varias veces que lo más importante no es ganar sino "jugar bien".
"Desde que empecé a entrenar a niños pequeños me han dicho que lo importante es ganar. No, lo que importa es jugar bien. Para que podamos luchar por ganar la Eurocopa 2024 tenemos que jugar bien al fútbol. Tenemos que mantener la fe en nuestro estilo. Es el camino a seguir", dijo tajantemente.
Italia quiere estabilidad para el futuro tras ganar la última Eurocopa de 2021, pero quedarse también fuera de los dos Mundiales más recientes. El partido contra España permitirá saber en qué punto se encuentra.
Spalletti ha tenido menos tiempo que De la Fuente para desarrollar la selección que quiere, pero los resultados han sido buenos hasta el momento: siete victorias y una derrota, que fue ante Inglaterra (3-1). 20 goles a favor y nueve en contra completan los números del conjunto italiano en esta nueva era.
Luciano, además, no se casa con un dibujo. Ha cambiado de formación (todo lo contrario a Mancini, 'casado' con el 4-3-3), pero sobre todo de jugadores: nunca ha mantenido el mismo once en sus 11 partidos dirigiendo a Italia.
Las variantes de Italia
Spalletti debe decidir qué formación utiliza contra España. En el debut ante Albania apostó por un 4-3-3 (o un 4-2-3-1 según qué momento del partido), pero podría apostar por tres centrales frente a la Selección de Luis de la Fuente. Gianluca Mancini sería el favorito para sumarse a Bastoni y el joven Calafiori en la zaga, siendo el jugador de la Roma el encargado de tapar a Morata en los espacios.
La otra alternativa de Spalletti es mantener la línea defensiva de cuatro, con la opción de mantener el once exacto que ante Albania o la de meter a Cristante como pivote y 'sacrificar' a Frattesi. En Italia preocupa, sobre todo, el gran trabajo que hace la Selección en la presión tras pérdida. En España incomoda un poco no tener claro el planteamiento que pueda seguir la Azzurra, que además impregna de intensidad a cada uno de sus jugadores.
Barella, la clave
Italia no va a regalar el balón. Es una selección que se gusta con la posesión y sabe que el mayor peligro de España viene, sobre todo, si la tiene. Para ello, cuenta con un excelente completísimo centrocampista como es Nicolo Barella. La estrella del Inter de Milán es el líder de la Azzurra, acompañado de la experiencia de Jorginho.
El italiano, de 27 años y padre de cuatro hijos, es un rompedor de líneas nato, tanto en conducción como con filtraciones. Su visión y desplazamiento del balón impulsa los desequilibrios de algunos de sus compañeros como Dimarco o Chiesa. Es también un excelente llegador con olfato de gol, lo que le convierte en un mediocampista total.
Los números de Barella en la Serie A esta temporada muestran su influencia en el juego: es el 5º centrocampista que más veces entró en contacto con el balón y el 1º que más pases dio en campo contrario.
Barella llegó a la Eurocopa con unas molestias en el cuádriceps que le hicieron peligrar para el partido ante Albania. Solamente ser duda ya provocó un cisma en Italia. Pero estuvo y marcó el gol de la remontada del partido. El '18' es el termómetro de la Azzurra.
El '9' que no sonríe
La incógnita de Italia puede ser su delantero. Gianluca Scamacca es el Morata de la Azzurra, ya que es su '9' y un jugador al que la crítica parece perseguirle constantemente. Le falta gol para la responsabilidad que tiene: sólo ha marcado uno en 17 partidos con Italia. Anotó en la derrota contra Inglaterra, en octubre del año pasado.
Ha pasado momentos de dificultad, en los que hasta dejó de contar para Spalletti que le llamó "vago". Así le intentó espolear el seleccionador italiano, como hizo su entrenador en el Atalanta de otra manera. Gasperini le dio el palo antes que la zanahoria, 'invitándole' al delantero también a correr más... y a sonreír ante la presión. Su final de temporada, marcando 12 de sus 19 goles en el curso a partir de marzo, puso de acuerdo a toda Italia de que debía ser el '9' para la Eurocopa.
Se espera mucha igualdad para este jueves entre España e Italia, dos selecciones que parecen mirarse en el mismo espejo. Los de Luis de la Fuente, eso sí, llevan más camino recorrido y ese punto extra de ser más equipo es el que puede decantar la balanza en el grupo B de la Eurocopa.