Lamine Yamal y Nico Williams celebran un gol en la Eurocopa.

Lamine Yamal y Nico Williams celebran un gol en la Eurocopa. REUTERS

Eurocopa

Lamine Yamal, Nico Williams y toda una generación que sueña con la segunda estrella y mira hacia el Mundial 2030

Ambos han sido dos de las mayores sensaciones de la Eurocopa con goles importantes y un desparpajo impropio de su juventud.

15 julio, 2024 13:57

23 años. Esa era la edad con la que David Villa, máximo goleador histórico de la Selección, debutó con España. Algo habitual y que entraba dentro de los planes de desarrollo de cualquier futbolista, pero que se ha convertido en un estreno tardío echando la vista a los últimos meses.

Concretamente, está en boca de todos lo ocurrido con Lamine Yamal. Una de las máximas estrellas de la Selección y que apenas acaba de cumplir los 17 años. Es decir, cuando tenga los 23 de Villa, España estará disputando en su país el Mundial 2030. Ver para creer.

Lamine Yamal no tiene techo. Su carrera está quemando etapas a pasos agigantados. Hace apenas un año debutó con el Barça y disputaba un torneo sub 17 con España. Algo más de 365 días después ha logrado llevar a la Selección hasta la cuarta Eurocopa de su historia. Y lo ha hecho dejando algunas actuaciones para el recuerdo.

Sin ir más lejos, su partido contra Francia fue su presentación definitiva al mundo. Un choque de máximo nivel en el que se sacó de la chistera un zurdazo inapelable que acabó colándose en la escuadra de Maignan. También ante Georgia o Croacia. Desde el inicio de la Euro se ha echado el equipo a la espalda. Lo demostró también en la final frente a Inglaterra. Esta vez no tuvo la fortuna del gol, pero su descaro y desparpajo fue importantísimo. Fue quien le dio la asistencia a Nico Williams.

Lamine es un futbolista adelantado a su edad. No solo en lo futbolístico, donde domina ante cualquiera, sino también en lo mental y en lo táctico. No se rinde y ofusca ante un regate fallado y ha aprendido 'pillerías' inpropias para un chico de 17 años. Como ejemplo, la falta a Theo Hernández en los últimos minutos contra Francia. Una acción propia de un veterano y que él ejecuta como si fuera uno de ellos. 

Tiempo para crecer

En el horizonte queda el Mundial 2030. España será sede en la Copa del Mundo por lo que las expectaciones con el combinado nacional serán máximas. Y los motivos para la ilusión también lo son. Lamine Yamal llegará al torneo mucho más maduro y quien sabe si como uno de los mejores jugadores del planeta. La proyección es esa.

Además, contará con el bagaje de haber disputado un Mundial más y otra Eurocopa. Es decir, Lamine afrontará la cita mundialista de 2030 con dos Euros y una Copa del Mundo a sus espaldas. Y sólo con 23 años. Nunca se ha visto algo parecido. 

Lamine Yamal, con la medalla de campeón y el trofeo de la Eurocopa al fondo.

Lamine Yamal, con la medalla de campeón y el trofeo de la Eurocopa al fondo. REUTERS

Asusta ver en lo que se puede convertir la joven estrella española de aquí a seis años vista. En este tiempo ganará en lo físico, en lo táctico y podrá incluso seguir mejorando y depurando aspectos técnicos. Un claro ejemplo es Vinicius que ha sufrido una transformación espectacular en la definición en apenas tres temporadas.

Pero conviene ir con calma. Lamine es muy joven y tendrá que estar muy bien cuidado, tener suerte y tomar buenas decisiones en su carrera para convertirse en el futbolista que apunta a ser. El tiempo dictará sentencia, pero la ilusión de España con su joven estrella es total. 

El líder de una generación

Lamine es la gran esperanza del fútbol español, pero no estará solo en un camino ilusionante que comienza la Selección tras su éxito en Alemania. A su lado se encuentra Nico Williams, una de las grandes revelaciones de la Eurocopa. Un futbolista total que se ha destapado al mundo con exhibiciones portentosas como la final ante Inglaterra o los octavos frente a Georgia.

Ambos representan el futuro ilusionante de España, por lo visto en esta Eurocopa y por lo que hay por detrás. Partiendo del caso de Gavi, un futbolista de 19 años que habría sido otro pilar en este torneo de no haber sufrido aquella fatídica rotura del ligamento cruzado que sufrió el pasado mes de noviembre. De hecho, el centrocampista del Barça vivió esta jornada de la final como uno más del grupo.

Pedri conduce el balón durante el partido ante Italia.

Pedri conduce el balón durante el partido ante Italia. REUTERS.

En la Selección, así como en el Barça, cruzan dedos para que Gavi vuelva bien de su lesión. A la par, esperan que Pedri (21 años) acabe con el gafe que le persigue en forma de lesiones y que le llevó a caer de nuevo en combate durante esta Eurocopa. Los culés son las grandes apuestas de futuro para la medular española, junto al también azulgrana Fermín López (21) y unos Dani Olmo (26) y Martín Zubimendi (25) todavía con mucho gas en sus carreras. Gabri Veiga (22), en segundo plano, sigue siendo una opción de futuro.

La otra baja destacada en la convocatoria para la Eurocopa fue el gerundense Pau Cubarsí, una revelación casi al nivel de Lamine puesto que a sus 17 años se ha erigido como titular en el centro de la defensa del Barça. Va camino de serlo dentro de poco en la Selección, aunque este verano se prefirió que acudiera a los JJOO de París en lugar de a la Euro. En su lugar se quedó Dani Vivian (24 años), un jugador que también acaba de empezar su recorrido en el equipo nacional.

La presencia de Cubarsí, y su crecimiento, será muy importante en la Selección no dentro de mucho. Con Nacho y Laporte posiblemente dando sus últimos coletazos, son necesarios los recambios. El valencianista Cristhian Mosquera (20 años), de padres colombianos, es el que mejor posicionado está para el otro hueco. Si bien los cuatro centrales han aplacado las críticas en esta Eurocopa, afianzar la zaga debe ser una de las tareas claves en este equipo para los próximos años.

Como lo tiene que ser tener un '9' de garantías. Más allá de la polémica que ha perseguido los últimos años a Morata, su adiós casi anunciado obliga a pensar en el futuro. Hay jugadores para emplearse como falso '9' como Ferran Torres (24 años) o un Ansu Fati, todavía de 21, sobre el que alguno mantiene la fe en su renacer. 

Pero si se trata de encontrar un '9' puro, no hay otro proyecto más interesante, que esté ya cerca de la élite, que Samu Omorodion (20 años). El melillense, por el que el Atlético de Madrid ha rechazado 33 millones del Chelsea en este arranque de verano, está creciendo a pasos agigantados tras su año en el Alavés y apunta a ser importante como rojiblanco. Fijo en la sub21, participará en los JJOO y pronto podría estar a las puertas de la Absoluta.