Los Mundiales son momentos de una máxima repercusión social. Un escaparate para que te conozcan en todo el planeta. Los jugadores lo saben y, por eso, dan todo lo que tienen para que su selección esté presente en esas grandes citas y lleguen lo más lejos posible. Si se habla de ellos, puede que un gran equipo les fiche y asciendan dentro del Olimpo futbolístico. A veces basta una buena jugada o un gol. Otras, un peinado es suficiente para que se hable de ellos.
En 2002, Ronaldo, "el gordo", sorprendió a todos los aficionados con un 'look' estrambótico. Se afeitó toda su cabeza menos la parte frontal, dejándose un flequillo del que todos hablaron pero que casi nadie se atrevió a imitar.
Cuatro años antes, en 1998, los jugadores de la selección de Dinamarca prometieron que si alcanzaban los octavos de final se teñirían de rubio. Tras vencer ante Colombia e Inglaterra en la fase de grupos, todos los jugadores cumplieron su promesa ante Croacia. Todos menos uno, el portero, que era calvo.
Otro de los peinados que pasó a la historia fue el de Valderrama. El colombiano paseó su melena rubia por los Mundiales de 1990, 1994 y 1998. En el último que disputó coincidió con el nigeriano Taribo West, cuyo peinado fue calificado por muchos como uno de los peores de la historia.