Paco Alcácer cambió Mestalla por el Camp Nou casi sobre la bocina del mercado de fichajes. Lo más probable es que pensase en lo complicado que sería la vuelta a 'su' estadio, aunque seguramente no se imaginó tal nivel de agresividad contra él. Así se lo han dejado claro los aficionados 'chés' que han recibido al autobús del Barcelona. Y lo más normal es que la bronca siga en el interior del estadio.
El delantero nacido en Torrent abandonó el Valencia para convertirse en el tercer delantero azulgrana. Oyó la llamada de Luis Enrique desoyendo lo que la afición del equipo de su vida, que le pedía se quedara en un equipo que ha perdido a todas sus estrellas en los últimos años. De David Villa a David Silva pasando por Juan Mata o Jordi Alba. Él fue el último en salir y quizás acumula toda la frustración de una afición que no ve a su equipo en lo más alto hace demasiado.
Una vez dentro de Mestalla, el público cantó "Sal del banquillo, Alcácer sal del banquillo", ya que su exjugador no fue titular en el estadio del Valencia.
En lo que ha transcurrido de la presente temporada, el delantero del Barça está completamente negado de cara a puerta. Ha disputado siete partidos (seis de liga y uno de Champions) y un total de 314 minutos en los que está totalmente peleado con el gol.