4.000 euros de multa por la pancarta de apoyo al 'Prenda'

La Comisión Antiviolencia propuso multar con 4.000 euros a la persona que colocó una pancarta con la leyenda "Gordo" en el Osasuna-Sevilla el pasado 22 de enero y declaró de alto riesgo el partido Sevilla-Leicester de La Liga de Campeones y el Betis-Sevilla de la jornada 24 de Primera división.

La Comisión consideró que el mensaje de la citada pancarta supone "un claro apoyo al aficionado que se encuentra actualmente en prisión preventiva por su presunta participación en una agresión sexual ocurrida en Pamplona en julio de 2016".

La multa conlleva además prohibición de acceso a recintos deportivos durante doce meses, según informó el Consejo Superior de Deportes (CSD).

Entre las otras propuestas de sanción acordadas por Antiviolencia destaca una multa de 5.000 euros, con dos años de prohibición de acceso a recintos deportivos, para un aficionado que durante el Sevilla-Barcelona, jugado el 6 de noviembre pasado, agredió violentamente a otro en una reyerta en la zona donde habitualmente se ubican los miembros del grupo Biris Norte.

La Comisión también propuso dos multas de 3.001 euros para dos espectadores de los partidos Deportivo-Barcelona y Leganés-Sporting, de la pasada jornada de Liga. El primero de ellos por esconder una lata de cerveza para burlar los controles de acceso al campo y el segundo por saltar la valla de separación de la grada del terreno de juego.

Ambos tendrán prohibido el acceso a recintos deportivos durante seis meses

Otros dos aficionados locales que asistieron al Leganés-Sporting fueron propuestos para abonar una multa de mil euros, que conlleva tres meses de prohibición de acceso a recintos deportivos, por encender sendos botes de humo en el estadio.

Antiviolencia también propuso multar con 1.500 euros a un aficionado de Osasuna que insultó "grave y reiteradamente" a un vigilante en el partido contra el Real Madrid de la última jornada de Liga, al que prohíbe a su vez acceder a recintos deportivos durante tres meses.

Multas de 10.000 euros, y prohibición de acceso a los recintos deportivos por un periodo de dos años, a nueve aficionados visitantes, presuntamente integrantes del grupo BUKANEROS que, participaron en la agresión que sufrió un grupo de clientes de un establecimiento y los numerosos destrozos provocados en la terraza de dicho local el día anterior al partido: Mallorca-Rayo, jugado el 12 de febrero.