Griezmann, el "placer doble" del Cholo que coquetea con el Madrid

Minuto 85. Correa recibe la pelota, encara a sus defensores, ve a Griezmann tirando el desmarque y se la cede al francés para que iguale el encuentro. El ‘Principito’ baila, celebra y bromea. Mira a lo alto, ve el cielo de Madrid y vuelve a su campo ante la búsqueda de una eventual remontada. Sin embargo, el derbi termina en empate (1-1). Y él es el protagonista absoluto. En principio, sólo por lo estrictamente futbolístico, porque después vendría lo extradeportivo. En zona mixta, al ser preguntado por la posibilidad de fichar por el Real Madrid, el francés no quiso negarlo: “No descarto nada, pero estoy feliz en el Atlético”.

Visto desde la barrera, quizás sus declaraciones no llegan en el momento adecuado. En primera instancia, por toda la rumorología que ha aflorado en los últimos tiempos sobre el posible traspaso de Theo Hernández al eterno rival. Y, en segundo lugar, porque a corto plazo -salvo que haya cambiado de opinión en los últimos días- pinta en rojiblanco. Así lo ha hecho saber Simeone en varias ruedas de prensa, el club y el propio jugador en más de una ocasión. Es decir, a pesar de sus palabras -y sin entrar en detalle si son oportunas (o no)-, los atléticos pueden estar tranquilos.

La principal razón por la que no deben temer los aficionados es Simeone. Mientras el técnico argentino esté al frente del equipo, Griezmann seguirá en la plantilla. O, al menos, eso parece deducirse tras lo ocurrido el pasado verano, cuando el Cholo y él hablaron para que se quedara. Y el próximo verano no va a ser distinto. Entrenador y delantero estarán unidos un año más como mínimo. Eso parece seguro.

Pero, dejando a un lado la rumorología, los elogios repartidos tras su partido han caído del cielo como si estuviera diluviando. Para Simeone, fue “el mejor del partido junto a Savic, Godín y Filipe Luis”. Aunque, tal y como reconoció, “ya no le alcanzan las palabras para describir a un jugador que tiene ilusión. Me emociona cualquier jugador que corre y trabaja, pero él tiene talento, y cuando un jugador con talento hace lo que él, el placer es doble”.

Un placer que además es compartido con la afición rojiblanca, que lo ha visto evolucionar desde que llegara: “Al principio había gente que discutía por qué lo ponía por medio. Pero ahora ha evolucionado y lo tiene todo: tira diagonales largas, tiene precisión, tiempo, giro con la pelota, puede ir al costado… Y eso que le costó al principio, pero desde Bilbao, empezó a responder...”. Y ahora puede acabar en un final de ensueño: con el equipo en cuartos de Champions y el cierre del Calderón.