El Sevilla encadenó su cuarto triunfo al ganar a la UD Las Palmas gracias a un golazo de Jesús Navas a siete minutos del final, en un centrochut con el que celebró su partido oficial número 400 con su club de siempre, en el regreso de Vitolo, increpado por su antigua afición, al Ramón Sánchez Pizjuán. [Narración y estadísticas: 1-0]
El equipo canario estuvo mejor en el primer tiempo, pero careció de profundidad en ataque, y en el segundo terminó sucumbiendo ante un conjunto sevillista que lo superó por completo en la reanudación y que, con el bonito tanto de Navas, encontró el premio a su mejor juego, su continua insistencia y su mayor empuje ofensivo.
En el tumultuoso regreso al Sánchez Pizjuán de Vitolo, abroncado todo el choque por el sevillismo al no perdonarle su 'huida', sobre todo por las formas, al Atlético de Madrid -previo paso por Las Palmas-, el técnico local, el argentino Eduardo Berizzo, cambió de nuevo a casi todo el once. Del que ganó 0-1 en Girona repitieron solamente el meta Sergio Rico, el galo N'Zonzi y el brasileño Ganso. Con el argentino Pizarro y Nolito aún lesionados, su idea era refrescar a su gente ante las próximas citas, con el Atlético en LaLiga y el Maribor esloveno en la fase de grupos de la 'Champions'.
El técnico del conjunto amarillo, Manolo Márquez, condicionado por las bajas del lateral Dani Castellano y del croata Halilovic, el galo Loic Rémy y el marroquí Oussama Tannane en ataque, también hizo rotaciones, con Vitolo como titular. Dejó en el banquillo al canterano Borja Herrera y alineó a David García de central para que Ximo Navarro cubriera el lateral zurdo, y apostó por Hernán Santana en el medio campo y por 'Tana' en la banda derecha, en lugar de Vicente Gómez y 'Momo'.
Con Vitolo pitado e increpado cada vez que tocaba la pelota, el choque empezó con mucha intensidad. Al principio, los sevillistas llevaron el mando y el peligro a la meta del argentino Leandro Chichizola, que neutralizó bien sendos remates de dos compatriotas suyos: Correa, éste de cabeza, y Mercado, con un fuerte derechazo.
En un partido trabado, con escaso ritmo y sin profundidad en ambos equipos, el Sevilla quiso mantener su dominio, pero le costó un mundo llegar arriba y poco a poco se fue diluyendo, justo cuando la UD Las Palmas, muy firme atrás, empezó a controlar más el balón.
Así, los hispalenses, algo agobiados por la tupida red tejida por los isleños en el medio campo, sólo gozaron de otra buena opción por medio del francés Wissam Ben Yedder que abortó Chichizola a diez del descanso, ante un cuadro canario también carente de verticalidad y que sólo buscó el gol en una falta sacada por Tana y en dos tímidos intentos de Vitolo, que remató primero desviado y luego cabeceó mal.
En la reanudación, el Sevilla, más vertical e intenso, salió con más brío y dominó a una UD Las Palmas más conservadora, que no quiso arriesgar para no darle espacios al rival y esperó su oportunidad, pero éstas fueron para el bando local, con Jesús Navas, que cumplió 400 partidos oficiales con su club de siempre, ahora más eléctrico.
Los andaluces se mostraron más incisivos en ataque, llevaron todo el peso del choque y, con las galopadas por las bandas de Escudero y Navas, obligaron a trabajar mucho más en defensa al equipo canario.
Ya sin Vitolo, hace poco uno de los ídolos del sevillismo y ahora proscrito y 'villano', al retirarse con problemas físicos en el 58 y sustituirlo Momo en medio de otra gran bronca para el internacional, Las Palmas no halló la forma de hacer daño a los locales y, aunque no perdió el sitio, empezó a sufrir ante la ofensiva sevillista.
Lo intentó primero Ben Yedder, pero Chichizola despejó bien su remate, que llegó tras un robo cerca del área de un incombustible Navas. El 'Duende' de Los Palacios inquietó una y otra vez a la zaga canaria con sus cabalgadas por la derecha y ya avisó a 18 minutos del final con un tiro que paró sin problemas el meta argentino.
Jesús Navas halló el premio a su insistencia y la de su equipo, con Sarabia y los argentinos Franco Vázquez y Éver Banega ya en el campo por Correa, Ganso y Krohn-Dehli, con un golazo a siete del final al sacarse de la chistera un sutil centrochut desde la derecha que sorprendió por alto a Chichizola, hasta entonces muy seguro. Su tanto dio un trabajado triunfo al Sevilla ante una Unión Deportiva que buscó empatar a la desesperada, pero ni Calleri ni Aythami acertaron de cabeza en uno de sus centros postreros.