El Deportivo, con los goles de Lucas Pérez, que comandó la reacción de su equipo, y el rumano Florin Andone, en los estertores del choque, firmó una remontada ante el Getafe (2-1) en el estadio de Riazor, donde su técnico, Pepe Mel, afrontaba prácticamente un ultimátum.
Los deportivistas, que salen del descenso, tenían que ganar para dar opciones a su entrenador de seguir en el banquillo y fueron sus delanteros los que lo consiguieron al darle la vuelta al tanto que había anotado el senegalés Amath, que pudo ver puerta por segunda vez, y que dejaba al preparador blanquiazul más fuera que dentro del conjunto coruñés.
Mel se la jugaba ante el Getafe en un encuentro que arrancó con el guión previsto: la posesión para los locales, que llegó a superar el 70 por ciento en la primera mitad, y las contras, para los visitantes, que intentaron sacar partido una vez más a su buena colocación, con las líneas muy juntas en el repliegue para desactivar al rival.
El Getafe, compacto, sabía que el paso de los minutos jugaba a su favor por la necesidad del Deportivo, que podía convertirse en ansiedad conforme avanzara el encuentro, y estaba preparado para aprovechar cualquier error o jugada de estrategia que surgiera en el camino.
Cada transición rápida del equipo de Pepe Bordalás generó tensión en Riazor. La primera no prosperó por un inoportuno resbalón de Amath (min.15), pero fue suficiente para estresar a la afición deportivista. El Getafe, a lo suyo, sin tener el balón, monopolizó las ocasiones en los primeros veinte minutos y, en una falta lateral que ejecutó Antunes, Cala volvió a dejar en evidencia a los locales al rematar libre de marca en el área.
El Deportivo despertó con las acciones individuales de Luisinho, al que incluso se le premió desde la grada por hacer una falta en el medio del campo para cortar un contragolpe, los pases lejanos del central Schär, la calidad del uruguayo Valverde y el esfuerzo de Lucas Pérez.
El delantero coruñés estuvo a punto de tener recompensa en el ecuador del primer periodo tras un error de Djené en la cobertura, pero el balón acabó en el lateral de la red. El Deportivo, que rozó el ridículo en uno de los saques de esquina de los que dispuso, tuvo sus mejores minutos pasada la media hora, pero apareció Guaita.
El portero fue providencial en un remate de Fede Valverde con el exterior y, sobre todo, en un disparo de Lucas Pérez que desvió con una gran parada antes de rehacerse, levantarse y volver a salvar a su equipo ante Juanfran. El Deportivo, frustrado, pasó de dominador a dominado en los últimos instantes del primer tiempo, en los que el Getafe destapó nuevamente sus carencias defensivas, pero no fue capaz de aprovechar la empanada blanquiazul.
Con los nervios a flor de piel, los deportivistas arriesgaron más en la segunda mitad y Guaita fue otra vez un seguro para su equipo al despejar un latigazo de Çolak. Precisamente de un error del turco con el balón, surgió el primer gol del partido, obra de Amath tras recibir una asistencia del uruguayo Damián Suárez, superar a Juanfran y Schär y batir a Pantilimon (min.54).
El Getafe tenía el partido donde quería y pudo incrementar la ventaja diez minutos después con una jugada espectacular de Amath, quien avanzó en la frontal del área con una sensacional ruleta y se estrelló en dos ocasiones con el guardameta del Deportivo. En cuestión de segundos, los coruñeses respondieron con una genialidad de Lucas Pérez, que se revolvió en el área y metió la zurda para sorprender a Guaita y equilibrar el partido (min.66).
El delantero coruñés, que aún no está en plenas condiciones, comandó la reacción del Deportivo y sirvió el segundo tanto en bandeja al argentino Fede Cartabia en el minuto 72, pero el extremo finalizó el ataque con un remate flojo que pudo despejar Guaita a córner.
Mel trató de dar un último impulso al Deportivo en la recta final del choque para salvar el puesto y su equipo completó la remontada en el minuto 86 con un centro de Fede Cartabia desde la derecha que remató en dos tiempos el internacional rumano Florin Andone.
El Deportivo acabó transformándose en el Getafe, usó sus armas para mantener la ventaja y acabó llevándose tres puntos que le sacan del descenso antes del segundo parón y que evitan una destitución.