Quedan apenas cuatro partidos en el Metropolitano, cuatro oportunidades de decir adiós, cuatro jornadas para convertir la grada en un homenaje a Torres. Ese es el objetivo de aquí a final de temporada. Con el Barça liderando sin complejos y la segunda plaza prácticamente asegurada, el Atlético enfila sus últimos días de curso entre la nostalgia del ‘Niño’ que se marcha para siempre hecho un hombre y el ofrecimiento de ganar la Europa League. Por él, por Fernando, pero también por una afición que celebró sus 115 años de historia con una victoria ante el Levante y tres goles antológicos [narración y estadísticas: 3-0].

Simeone y Godín se deshacen en elogios al Niño Torres



Lo cierto es que el Atlético no hizo su mejor primera parte de la temporada. Ni siquiera su mejor partido. Eso es una evidencia. Pero consiguió sus dos objetivos. Por un lado, evitar que el Levante tirara a puerta; y por otro, marcar en el arranque. Vitolo, que poco a poco va cogiendo los automatismos del equipo, cabalgó desde la banda derecha, se la puso a Correa y éste hizo el resto. Quiebro delante de tres defensas, disparo y gol. No necesitó más el equipo de Simeone, que estuvo a punto de aumentar su ventaja antes del descanso. Sin embargo, el árbitro decidió no pitar penalti. Griezmann cayó dentro del área por un golpe de Oier y el colegiado no lo consideró suficiente. Da igual. A pesar del resultado y de las escasas ocasiones, las sensaciones eran mejores en el lado rojiblanco.



El Atlético seguía con su plan: solidez defensiva y contraataque. Y así encontró el segundo. Esta vez, Vrsaljko fue el que la puso desde la derecha y Griezmann el que remató de primeras para mandarla a la escuadra. Mandaban los rojiblancos y, por el lado del Levante, apenas si Morales era capaz de poner en problemas a la defensa colchonera. Pero, eso sí, lo intentaba buscando sacar algún punto del Metropolitano, porque tras la victoria del Deportivo el sábado, el equipo de Paco López está a cinco puntos del descenso. Parecen muchos, pero por si acaso, no cejaron hasta el final. Concretamente, hasta que salió Torres.



Fernando sustituyó a Griezmann ovación mediante y el Atlético sentenció el partido. Y, además, con gol de Torres. Correa se la puso al ‘Niño’ y éste remató de primeras al palo contrario. Éxtasis en el Metropolitano, brazos en jarra en el Levante y partido finiquitado. El equipo de Simeone no va a ceder hasta el final. Sabe que tiene difícil ganar la Liga, pero no va a dejar de sumar hasta que vea escapar al Barcelona con el título.



Mientras tanto, despedirá a Fernando, que sigue apurando sus minutos con el Atlético. “Espero que no sea mi último gol aquí y que tampoco sea mi último partido. Voy a luchar por estar en el once inicial hasta que esto se acabe”, reconoció tras la victoria contra el Levante. Y lo hará por él, por los atléticos, por los 115 años de historia del club y por los otros niños que este domingo, desde la grada, soñaban con estar algún día en su lugar. Y, a ser posible, con una Europa League más en sus vitrinas.

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