En medio de la polémica levantada por los problemas logísticos que presenta la Villa Olímpica de Río a diez días del inicio de los Juegos, el Zika ha regresado a primer plano. Mientras en España nacía el primer bebé con microcefalia asociada al virus, en un estudio hecho público este miércoles por la Escuela de Salud Pública de Yale (Connecticut) se afirma que el riesgo de contraer el Zika durante el transcurso de la competición deportiva es "insignificante".
Según los expertos encargados de elaborar este informe, y en el peor escenario posible, entre 3 y 37 personas del medio millón que se espera que se desplace a la ciudad brasileña volverían a su país con el virus.
De esta forma, los resultados del estudio reafirman la postura de la Organización Mundial de la Salud (OMS), quien había asegurado que no existen "razones de salud pública" para suspender o reubicar los Juegos, como sí había solicitado un grupo de más de 150 científicos ante el riesgo de difusión y las consecuencias médicas graves que puede provocar el virus.
"Es importante entender el bajo grado de riesgo que suponen los Juegos en el contexto de muchos otros factores que contribuyen a la propagación internacional del Zika", dijo Joseph Lewnard, el autor principal del estudio, elaborado mediante un modelo matemático que recogía los contagios en Río de Janeiro, condiciones climáticas y patrones de viajes, entre otros factores.
El profesor Albert Ko, jefe del Departamento de Epidemiología de las enfermedades microbianas de la Escuela de Salud Pública de Yale, resumió que "la posibilidad de que los viajeros que regresen de los Juegos puedan expandir el Zika se ha convertido en un tema polémico que ha llevado a deportistas a renunciar al evento, y sin ninguna prueba, estigmatizando indebidamente a Brasil. Este estudio proporciona datos, que junto con los descubrimientos iniciales realizados por los científicos brasileños, muestran que las preocupaciones son en gran parte exageradas".
Además, el equipo de investigación dijo que es más probable que, en vez de a los deportistas y espectadores, el mosquito transmisor del Zika, el Aedes Aegypti, pique a otros turistas.