Mucho tiempo ha pasado, demasiado desde que España pusiera en 22 el récord de medallas conseguidas en unos Juegos. Fue en Barcelona 92, hace más de tres décadas. Los 13 oros, siete platas y dos bronces esperan relevo en el libro de la historia olímpica española.
París emerge como ciudad candidata a recibir el testigo de la capital catalana. En la ciudad gala arriba España con una delegación histórica de 382 deportistas, la más numerosa desde Barcelona 92 precisamente. Además, por primera vez en unos Juegos, competirán más mujeres (192) que hombres (190), lo que refleja un significativo avance en materia de igualdad en el deporte español.
Los mundiales previos a la cita gala han dejado un panorama más que positivo para el equipo nacional, cuyos deportistas han coleccionado hasta 30 metales en el ciclo hacia París 2024. El techo de España en estos Juegos lo marcará la capacidad de sus deportistas a la hora de transformar en medallas las buenas sensaciones. Tenis, bádminton, fútbol, atletismo, natación, escalada, tiro olímpico, ciclismo, taekwondo, waterpolo, vela judo y el imperecedero éxito del piragüismo, iluminan a España.
Alcaraz y Nadal, en tenis
El tenis parece uno de esos deportes que pueden contribuir notablemente a hacer crecer el medallero de España en estos Juegos Olímpicos. Las opciones de éxito en la categoría femenina parecen remotas, pero en el cuadro masculino las posibilidades se multiplican notablemente.
En la modalidad individual Carlos Alcaraz tiene todo el derecho del mundo a soñar con lo más grande en la tierra batida de París. Viene de ser campeón de Roland Garros en ese mismo escenario, y además en un gran estado de forma tras su reciente éxito en Wimbledon, por lo que es una de las opciones más firmes de la expedición española.
En dobles España también puede presumir de tener grandes opciones. Todo el mundo sueña con ver en acción a la pareja formada por Rafa Nadal y Carlos Alcaraz, pero también contará con opciones gracias al dúo formado por el número 1 mundial Marcel Granollers junto a Carreño.
El fútbol, un filón masculino y femenino
Para las de Montse Tomé será la primera participación olímpica de la historia. A la que llegan como vigentes campeonas del mundo tras imponerse en Australia a Inglaterra, vigente campeona de Europa. Posteriormente conquistaron la Nations League que les convierte en candidatas al podio.
La Rojita se presenta a París como subcampeona olímpica tras perder en la final de Tokio contra Brasil. Entre los elegidos por Santi Denia destacan nombres como Eric García, Pau Cubarsí y Alex Baena. Una sección que históricamente ha conseguido cuatro medallas, tres platas y un oro, el de Barcelona 92.
Fátima Gálvez y el tiro olímpico
El tiro olímpico ya le dio alegrías a la delegación española en los anteriores Juegos Olímpicos y 'amenaza' con volver a hacerlo. Fátima Gálvez, que en Tokio fue oro en categoría mixta con Alberto Fernández, cuenta con muchas opciones de sumar una medalla en la modalidad de trap. Alberto Fernández intentará hacer lo propio.
Hugo González, la esperanza en natación
El balear es una de las opciones más firmes de medalla. Llega en una temporada excelsa en la que se ha proclamado campeón del mundo de los 200 metros espalda, y en esta disciplina pretende alcanzar la medalla.
No será la única opción, ya que en los 100 metros espalda también se hizo con la plata en los pasados mundiales de febrero, por lo que cuenta con varios caminos hacia el éxito. España no tuvo medallas en natación en los pasados Juegos, así que Hugo González puede volver a poner las cosas en su sitio.
Ayuso y Lazkano, opciones en ciclismo
Aunque no son las opciones más claras de medalla, el ciclismo siempre es una prueba abierta que da lugar a sorpresas y España lleva algunos de los mejores ciclistas del momento. El trazado no es duro y cuenta con algunas pequeñas cotas, un terreno en el que tanto Juan Ayuso como Oier Lazkano se pueden desenvolver bien.
Ayuso llegará tras tener que abandonar en el Tour de Francia y habiendo renunciado a la contrarreloj para preparar mejor la ruta. Lazkano, por su parte, es uno de los ciclistas más en forma y un trazado así le irá bien. Tampoco se puede destacar a Alex Aranburu, campeón de España que podría tener su oportunidad en un sprint reducido.
Incombustible Maialen Chourraut en el slalom
Maialen Chourraut sueña con su cuarta medalla en unos Juegos Olímpicos. Lleva siendo un seguro de vida para la expedición española desde Londres 2012, y ahora a sus 41 años puede seguir haciendo historia en la modalidad de slalom. Fue bronce en Londres, oro en Río y plata en Tokio, así que conoce todos los escalones del podio.
En categoría masculina, Miquel Travé también en slalom cuenta con serias opciones y ha manifestado estar confiado en sus posibilidades de hacerse con una medalla. Serán sus primeros Juegos Olímpicos, pero eso no le asusta.
El piragüismo, una fuente de éxitos inagotable
Se ha convertido en uno de los deportes españoles por antonomasia en los Juegos Olímpicos. Tan solo la vela (21) suma más medallas Olímpicas que el piragüismo (20). Desde Atenas 2004, el mencionado deporte no falla a su cita con las medallas. En París tendrá más opciones que en otros Juegos.
La expedición estará liderada por Saúl Craviotto, deportista español -junto a David Cal- con más preseas olímpicas (6) de siempre. En la capital gala buscará desempatar en la prueba de K4 500, modalidad y distancia en la que se colgó la plata en Tokio.
En la embarcación estará acompañado por Marcus Cooper Walz, campeón olímpico en Río y abanderado español en París, Rodrigo Germade y Carlos Arévalo. Estos dos últimos además formarán pareja en el K2 500 en el que Cooper Walz competirá junto a Adrián del Río.
Las opciones femeninas se incrementan todavía más sobre la canoa, donde la pontevedresa Antía Jácome, quinta en la capital nipona, y la madrileña María Corbera serán compañeras y rivales.
Ambas, campeonas continentales de C2 200 hace poco más de un mes en el Europeo de Szeged (Hungría), formarán pareja en la prueba de C2 500, donde son las actuales subcampeonas del mundo. Además, lucharán, cada una por su parte, por una presea en C1 200, donde la gallega fue plata en el último Mundial.
Adriana Cerezo y Adrián Vicente, estandartes del taekwondo
El taekwondo español acude a los Juegos Olímpicos de París con un equipo liderado por la vigente subcampeona olímpica, Adriana Cerezo, que llega en su mejor momento para coronarse con el oro en la capital francesa, mientras que Adrián Vicente, Javier Pérez y Cecilia Castro aportarán para mantener el idilio que arrastra la disciplina desde Londres 2012, sumando desde entonces seis medallas y siempre con representantes hasta las rondas finales.
Adriana, que a sus 17 años debutaba en Tokio, es a los 21 una veterana precoz. Arriba en París tras ser bronce mundial hace poco más de un año y campeona continental tan sólo dos meses antes de que se encienda la mecha olímpica en París. En la capital gala buscará sacarse la espinita que le quedó clavada en Tokio cuando unos segundos le separaron de la presea dorada.
Adrián Vicente también se alzó campeón de Europa en mayo y tocó metal en el último Mundial. Llega a París con más bagaje que en los últimos Juegos, donde finalizó cuarto. Además, Javier Pérez Polo y Cecilia Castro, cuarto y segunda del ranking olímpico de sus respectivas categorías, también son grandes bazas para colgarse una presea.
Peleteiro y la marcha en atletismo
El deporte rey de los Juegos Olímpicos promete emociones fuertes para España. Con los 50 kilómetros marcha fuera del programa, en los 20 kilómetros tanto Álvaro Martín como María Pérez tienen serias opciones de obtener una presea para el atletismo nacional.
Hay otros nombres propios que están en el primer nivel, como es el caso de Ana Peleteiro en triple salto, seguramente una de las bazas más fuertes de toda la delegación. En esta misma disciplina, Jordan Díaz, reciente campeón de Europa, también apuesta por conseguir una presea.
Quique Llopis en los 110 metros vallas es otra firme apuesta, mientras que el equipo de relevo de marcha también aspira a sumar otro metal más para el medallero español.
Carolina Marín resurge a tiempo para el bádminton español
París será testigo de la confirmación de Carolina Marín. Es la gran baza para el bádminton nacional. La histórica campeona olímpica en Río 2016, lastrada por graves lesiones, ha resurgido en los últimos dos años y se sitúa como una de las favoritas para alzarse con la presea dorada.
Se perdió la cita de Tokio por culpa de una rotura de ligamento cruzado anterior y de ambos meniscos en su pierna izquierda. Sin embargo, se ha recuperado y en su vuelta a la competición ya colecciona dos oros europeos, otro entorchado en el All England y un subcampeonato mundial. Marín ocupa el tercer puesto en el ranking de la Badminton World Federation.
La escalada de Alberto Ginés hacia la medalla
Alberto Ginés sorprendió en los anteriores Juegos Olímpicos al colgarse la medalla de oro en una disciplina -la escalada- que estrenaba su camino olímpico y tendrá continuidad en París bajo una serie de modificaciones. Se separa la velocidad (lead) por un lado y la de boulder y dificultad, por otro, siendo esta última la especialidad del cacereño.
Su billete para París 2024 no lo ha sellado hasta finales de junio de este mismo año y no sin mucho sacrificio. Ha tenido que superar lesiones y apurar las opciones en el Preolímpico. Ahora, podrá defender a partir del 5 de agosto en Le Bourget Cimbing de la capital gala su oro olímpico, siendo Alberto Ginés otra de las claras opciones de medalla de España en esta cita.
La vela, otro seguro
Donde España cuenta con muchas opciones de alzarse con una medalla es en la vela. La pareja formada por Diego Botín y Florian Trittel no se esconde y ya ha dicho que va sin tapujos a por el oro olímpico en la regata de 49er. También en esta disciplina Támara Echegoyen y Paula Barceló aspiran a conseguir una presea para España.
Las opciones en judo
El judo es uno de esos deportes en los que España no lleva seguramente a la mejor baza en ninguna de las categorías, pero sí a varias figuras que aspiran a pelear por las medallas y que pueden dar la sorpresa en cualquier momento.
Es el caso de Fran Garrigós, David García o Niko Sherazadishvili en la categoría masculina, así como Ai Tsunoda en féminas. La expedición judoka es nutrida y el medallero español aguarda un metal en este deporte.
El waterpolo masculino y femenino no falla
El idilio de la selección española femenina de waterpolo con los Juegos se explica con medallas. En tres participaciones el combinado nacional ha sumado dos platas, la primera de ellas en su debut en Londres 2012. La otra llegó en Tokio. El peor resultado en sus tres participaciones fue el quinto puesto en Río 2016.
A París llegan también con la vitola de aspirantes, como subcampeonas del mundo y de Europa. En la fase de grupos se medirán a Estados Unidos, que ya les privó del oro en las finales de Londres 2012 y Tokio 2020. Italia, Grecia y Francia completan el grupo.
Por otro lado, la selección masculina puede presumir de ser uno de los pocos combinados españoles que ha conseguido una medalla de oro olímpico en deportes de equipo. Los éxitos recientes avalan el papel de España como favorita. Y es que España llega de ser campeona europea por primera vez en su historia tras imponerse a la anfitriona, Croacia, en la final. Además, firmó el bronce en el Mundial de Doha.
Lucía Martín-Portugués y la esgrima
Con su sable en la mano, Lucía Martín-Portugués es la gran baza española en la esgrima para estos Juegos Olímpicos. Con su historia de superación al mantener a raya la epilepsia, la madrileña de 33 años debutará en una cita olímpica y cuenta con opciones de subirse al podio.