Rahimi celebra el gol ante Arnau Tenas.

Rahimi celebra el gol ante Arnau Tenas.

Juegos Olímpicos

La provocación de Rahimi a Arnau Tenas tras el gol de penalti que acabó en tarjeta amarilla para ambos

El delantero marroquí bailó y celebró su penalti transformado en la cara del meta español. Samu Omorodion se suma al roce a través de las redes sociales. 

5 agosto, 2024 21:12

Pablo Barrios se preparaba para despejar un balón dentro del área cuando Richardson estiró la suya para provocar el penalti. El VAR avisó al recién entrado colegiado -tras la lesión del principal- que señaló la pena máxima transformado por el mencionado Rahimi.

España se vio obligada a remontar, algo que no había conseguido a lo largo de los Juegos. No sin antes haber vivido un tenso momento entre Rahimi, lanzador, y Arnau Tenas, guardameta. El delantero comenzó a bailar delante del portero español y con los brazos abiertos. 

La respuesta española fue inmediata. Fueron hacia él para recriminarle la celebración con claros gestos discrepantes. El árbitro medió y repartió una amonestación a cada protagonista. Tanto Rahimi como Arnau Tenas. El guion del partido cambió y España lo interpretó mejor que Marruecos para alcanzar la final. 

Los de Santi Denia comenzaron a crecer en el partido, aunque costaba crear ocasiones y cuando las generaban el poste las repelía. Emergió Fermín, en su faceta goleadora primero y de asistente después para regalarle a España, por segunda vez consecutiva, otra final olímpica. Ante Egipto Francia.

No obstante, el roce entre jugadores traspasó el terreno de juego. Samu Omorodion, delantero español, publicó en sus redes sociales un mensaje con un claro destinatario: Achraf Hakimi. Publicó varios emoticonos de pingüinos acompañados de caras llorando de la risa para hacer alusión a la celebración de Hakimi cuando Marruecos eliminó a España en el Mundial de Qatar.

Aquel encuentro se resolvió en una fatídica tanta de penaltis en la que Hakimi fue el encargado de anotar la pena máxima definitiva. Con pasado en el Real Madrid, el jugador lo celebró emulando el movimiento de un pingüino para dedicarle el gol a Mbappé, su amigo y compañero de equipo por aquel entonces en el PSG.  

El fútbol llegó tapadito a París, a lo bajini. No el fútbol en general, sino el español en particular. La resaca de la Eurocopa y el impacto mediático de la selección femenina relegaron a los de Santi Denia a un segundo plano. La victoria lograda ante Marruecos en semifinales revierte la situación y les permite soñar con el oro.