Uno de los deportes más seguidos en Estados Unidos, la NASCAR, acaba de ser salpicado con un gran escándalo que ha terminado con su director ejecutivo detenido y despedido. Brian France, que ocupaba el cargo desde el año 2003, pasó la madrugada del domingo en una comisaría de Nueva York tras convertir la calle en su circuito particular y conducir bajo los efectos del alcohol y otros estupefacientes, además de saltarse una señal de stop.

Según publica TMZ Sports, el CEO de la NASCAR fue detenido al este de Long Island el pasado domingo por duplicar la tasa de alcoholemia permitida, saltarse un stop y conducir bajo los efectos de otras sustancias como la oxicodona, un fuerte analgésico que puede ser utilizado como narcótico. Además, lejos de entregarse pacíficamente, Brian France amenazó a los policías con utilizar su supuesta amistad con Donald Trump para salir airoso de la situación.

Ahora ha sido la NASCAR la que a través de un comunicado ha anunciado la decisión de cesar al que hasta ahora era su director ejecutivo: "Brian France se ha tomado una excedencia por tiempo indefinido como presidente y director ejecutivo de la NASCAR. Con efecto inmediato, el vicepresidente ejecutivo, Jim France (tío de Brian), asume el cargo de presidente interino y director ejecutivo", reza el comunicado.

Por su parte, y pese a las amenazas a los policías que le detuvieron, France también emitió un escrito en el que se arrepiente de su conducta al volante: "Me disculpo con nuestros aficionados, con nuestra industria y con mi familia por el impacto de mis acciones. Tomaré una excedencia por tiempo indefinido de mi puesto para centrarme en mis asuntos personales", explicó el ya exdirector de la NASCAR.

Noticias relacionadas