El presidente de la Fórmula 1, Chase Carey, ha mostrado su deseo de que Mick Schumacher llegue algún día a participar en la categoría que su padre ganó siete veces. Lo ha hecho en declaraciones al diario alemán Bild tras la primera victoria de Mick en Fórmula 3.

"Sería una gran historia", confesó. "Michael Schumacher todavía juega un papel único en la Fórmula 1 como campeón mundial. Es y será un icono de nuestro deporte. Que su hijo Mick llegue a la F1 sería especial. Tocaría los corazones de muchos fans de una manera única".

Ese es el objetivo de Mick, que confía en seguir los pases de su padre y ganar, algún día, un título mundial. Ahora mismo, a falta de cinco carreras, el piloto alemán es octavo en su categoría. En la última, en Spa, donde su padre logró la victoria en seis ocasiones, consiguió su primera pole y su primer triunfo en carrera.

Aún es muy joven. Mick tiene 19 años y esta es su segunda temporada en la F3. Carey se ha comprometido a facilitar que los jóvenes pilotos puedan llegar a la categoría reina del motor y que así, dentro de unos años, Mick pueda defender sobre la pista el apellido de su padre.

Michael Schumacher, apartado de los focos mediáticos tras su accidente skiando en 2013, sigue todavía con su proceso de recuperación. Se conocen muy pocos datos sobre su estado de salud actual.

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