El año 2022 se presenta apasionante para muchos equipos en la Fórmula 1. Pero parece que no para Ferrari. Al menos, quieren arrancar teniendo un perfil más bajo de lo que se podía prever tras su buen final de 2021. Los italianos consiguieron meter a Carlos Sainz en el Top5 de pilotos y consolidarse como la tercera escudería tras Mercedes y Red Bull.
Sin embargo, las expectativas para el nuevo curso, el año del cambio, han comenzado algo apagadas. Uno de los motivos principales es la reducción de presupuesto. Este año pasará a ser de 140 millones de euros y en Maranello están acostumbrados a manejar casi el doble en sus mayores épocas de bonanza. Eso ampliaba mucho más el margen de error.
Además, gran parte de ese presupuesto ya está invertido, por lo que poco se podrá destinar al desarrollo del monoplaza durante la temporada. La mayoría de los esfuerzos han ido destinados a la creación del nuevo motor y la nueva cámara de combustión, conocida con el nombre de 'súper rápida'. El nuevo Ferrari tendrá un rediseño total del bloque tradicional que se ha ido perfilando durante más de un año.
Por si esto fuera poco, el nuevo modelo de la escudería italiana contará con un nuevo chasis y con una remodelación de los paquetes aerodinámicos que también han provocado un sobrecoste. Y para rematar, la enorme remodelación de plantilla que se ha llevado a cabo en la factoría del Cavallino Rampante con hasta 40 fichajes, algunos llegados desde Mercedes y Red Bull para intentar soñar con ese asalto a las primeras posiciones.
La realidad de Ferrari
"No habrá tan poco desarrollo como el año pasado, ya que ha sido casi nulo, al menos para nosotros. Pero si nos fijamos en 2019 ó 2018, creo que veremos menos que en aquellos años. Entonces, las escuderías grandes traían algo nuevo a cada carrera". Estas eran las poco alentadoras palabras de Laurent Mekies, director deportivo de Ferrari sobre esa hipotética evolución.
"Desde nuestro punto de vista, será difícil tener un gran número de actualizaciones con los límites de gastos que existen. Necesitas mantener unos puntos para desarrollar durante la temporada, porque habrá que ir aprendiendo más y más, y por ello, hay que encontrar formas para ajustarlo. Una vez que definamos todo, tendremos que desarrollar la aerodinámica y la mecánica y el número de actualizaciones dependerá de cada departamento".
Por si esto fuera poco, Ferrari es víctima de un miedo que tienen todos los equipos. El importante cambio de reglamento que espera hallar un paradigma diferente en la nueva Fórmula 1 obliga a grandes riesgos. Los equipos tendrán que probar cosas nuevas con el objetivo de dar con la tecla y construir el coche más ganador posible. Pero eso implica jugársela y si sale mal, necesitarán echar mano de todo su presupuesto para cambiar el paso cuanto antes y tiempo récord. Por lo que hay que tener algo guardado por si hay fallos graves.
"La dificultad estará en que todo depende del nivel de competitividad del resto. Si tienes un gran contratiempo a principios de temporada y no se correlaciona con lo demás, puedes invertir parte de tu dinero en dos o tres mejoras. Necesitas arreglarlo como sea, así que coges las partes, lo tiras a la basura y así es como lo solucionarás". La parte positiva para Ferrari es que sus principales rivales, Red Bull y Mercedes, están en una situación parecida tras haber gastado recursos y horas de trabajo en la pasada temporada hasta el emocionante final en Abu Dhabi.
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