Un enfurecido Sebastian Vettel no pudo contener su rabia al encontrarse en la antesala del pódium de Gran Premio de China al piloto ruso Daniil Kvyat a quien acusaba de haber comprometido su carrera y haber destruido cualquier opción de Ferrari culpando al piloto de Red Bull Racing de haber provocado la colisión en la que se vieron implicados los dos pilotos del Cavallino Rampante.
El alemán Sebastian Vettel colisionó y expulsó de la pista su compañero de equipo, quien tuvo que entrar en boxes para cambiar su alerón delantero condenando a Kimi Räikkönen a una carrera en continua remontada. Vettel acusó al joven piloto ruso de “loco suicida” durante el Gran Premio a través de la radio de su monoplaza, cuando finalmente se encontró con el piloto de su exequipo no pudo contenerse y delante de las comerás espetó toda la frustración que llevaba dentro.
El piloto de Ferrari abordó a Kvyat alegando. “¿Me preguntas qué ha pasado en la salida?. Si no llego a girar a la izquierda hubiéramos chocado y nos hubiéramos ido los tres fuera”. Sin darle tiempo a reaccionar le acusó de imprudente: “Viniste como un torpedo”.
Daniil Kvyat, feliz de verse entre los tres primeros tras las críticas sufridas en el arranque de temporada, no dudó en contestar sin amedrentarse por los cuatro mundiales que le acusaban de imprudente con un simple “bueno…” a lo que el alemán replicó, “No, bueno ¡no!". Sin darle tiempo a reaccionar le acusó de imprudente: “Viniste como un torpedo”.
El piloto de Red Bull se defendió alegando que “estaba compitiendo”. Vettel replicó una vez más cómo “si hubiera seguido en el mismo carril hubiéramos chocado”. La respuesta no podía ser más irónica: “entonces no haber seguido”. En el alemán la rabia se hacía aún mayor ante la indolencia del joven ruso explicándole “pero había otro coche en mi izquierda también y por eso me choque con el”.
La respuesta del piloto Red Bull fue todavía más elemental. “Tío no pude ver a los tres coches, venga ya. Sólo tengo dos ojos”. Como si de un padre enojado se tratase, Vettel le replicó que “vas a tener un accidente pilotando de esa manera”. La respuesta fue seca “no lo hicimos ¿verdad?”.
La reprimenda terminó a la hora de subir al podio para recoger los trofeos con Sebastian Vettel dejando claro a Kvyat, como si de una amenaza se tratara: “Has tenido suerte esta vez”.