Guanyu Zhou durante una rueda de prensa de la Fórmula 1

Guanyu Zhou durante una rueda de prensa de la Fórmula 1 Reuters

F1 MUNDIAL 2022

Guanyu Zhou, el primer piloto chino en la F1: el talento que dejó ver Fernando Alonso

El joven de 22 años despuntó en la Fórmula 2 y hace historia en la élite. Su llegada a Alfa Romeo fue criticada por Giovanazzi, anterior piloto.

26 marzo, 2022 07:00

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Guanyu Zhou (Shanghái, China; 1999) vive una temporada histórica. Tanto él como su país, que ve en el joven piloto al primer chino en conducir un Fórmula 1. Su llegada el año pasado estuvo plagada de críticas y menosprecios, pero pasados unos meses ya ha conseguido puntuar en la primera carrera subido al Alfa Romeo. La peculiar historia de Zhou comenzó con un kart y, por el camino, tuvo a Fernando Alonso de figura clave.

El chino, que ya ha escrito su nombre en el automovilismo de su país, terminó décimo en el GP de Bahrein logrando un punto para el recuerdo. Zhou despejó dudas y demostró estar preparado para competir en la Fórmula 1. Un premio que recompensa una carrera que comenzó con apenas 13 años.

Zhou dio sus primeros pasos, al igual que muchos de sus compañeros, en los karts. Tenía apenas 13 años y ya completaba circuitos en Inglaterra. El piloto chino creció y su pasión por el motor se desarrolló. Su talento le permitió estar en la cantera de Ferrari cuando era un adolescente. Y, en 2019, logró fichar por Renault, ahora Alpine, para competir en Fórmula 3. De ahí ascendió a Fórmula 2 y, tras quedar séptimo y sexto, logró la segunda plaza en 2021 ante Piastri. Todo hasta fichar en noviembre de ese curso por Alfa Romeo.

En un año donde las reglas de la Fórmula 1 han cambiado y el espectáculo se espera que vaya a más, Guanyu Zhou puede poner el listón alto. Por el momento, debutar en la máxima categoría no ha sido su único logro. Primera carrera y primer punto. Primera carrera y primeros halagos. El resto de la historia está por escribir, pero sus escasos 22 años dejan a China soñar con una incursión en el automovilismo.

Alonso, el ídolo que le dejó el coche

Fernando Alonso no solo supone un referente deportivo para la población española, sino que a lo largo de su dilatada carrera ha conseguido ganarse el respeto y admiración de todo seguidor de la Fórmula 1. También de un Guanyu Zhou que cuando Alonso ganó su primer Mundial en 2005 apenas tenía cuatro años de edad. Y lo mismo cuando una temporada después el asturiano hizo historia.

El piloto chino sabía quién era Alonso. Por ello, cuando ambos coincidieron en la cantera de Ferrari Zhou no dejó escapar su oportunidad. El por entonces aprendiz se fotografió con su admirado Fernando. Le siguió de cerca. Conoció a uno de sus ídolos mientras ambos defendían los mismos colores de la escudería italiana. Pero, por muy cercano que pareciera Alonso, estaban en niveles muy diferentes.

Ese primer encuentro quedaría como un recuerdo inolvidable en su camino. Lo mejor, sin embargo, estaba por llegar. Zhou y Alonso volvieron a coincidir en 2021 cuando el piloto asturiano le dejó su coche en los test en Austria. Zhou se reencontraba con su ídolo para manejar el Alpine. Consciente de la exposición a la que iba a someterse, no podía fallar. 

Zhou dejó buenas sensaciones y escribió su nombre para la parrilla futura de la Fórmula 1. Como indicó en su día, Alonso le "sirvió de inspiración para continuar" su carrera cuando era "más joven". Un primer paso que meses después se ha transformado en una competencia sobre el asfalto.

Ataques de Giovanazzi

Fue en noviembre de 2021 cuando se confirmó que Antonio Giovinazzi no iba a continuar sobre el Alfa Romeo. Se ponía fin así a varias semanas de rumores donde todas las miradas apuntaban a Zhou. El chino había dejado muy buenas sensaciones en Fórmula 2, especialmente en su último año con un subcampeonato, y el italiano se quedó sin sitio. La pareja que escogió la escudería iba a mezclar la veteranía de Bottas con la juventud de Zhou.

Sin embargo, esa decisión no sentó nada bien a Giovanazzi. El piloto de 28 años sembró de dudas el fichaje de Zhou. Según él, la razón del cambio era más económica que deportiva. Una decisión que confirmaba la teoría de Giovanazzi de que "ahora hay pilotos que deciden la política financiera de equipos enteros". 

"Era una batalla casi perdida. Es lo malo de este deporte, lamentablemente siempre ha sido así. Espero poder cambiar de opinión en el futuro, pensando en dónde empecé y hasta dónde llegué. Fue decepcionante, los rumores sobre mí cada vez eran más fuertes", llegó a asegurar en Corriere della Sera.

A pesar de esas palabras, el tiempo parece haberle dado la razón a Alfa Romeo. Zhou ha debutado y ha conseguido un punto en su primera carrera. Las sensaciones, además, son muy buenas. "Cuando firmé el contrato el año pasado la gente tenía pensamientos diversos sobre mi presencia en la Fórmula 1", recordó tras finalizar el GP de Bahrein. "Pero creo que he hecho todo lo que tenía que hacer para tener un asiento en F1".

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