Después de un arranque de pretemporada espectacular, hace ya varias semanas que ha quedado claro que Aston Martin se ha estancado y no está para pelear con los mejores. Los buenos resultados que logró Fernando Alonso en el inicio ya no han vuelto a aparecer y a una bajada del rendimiento del coche se le suman también decisiones de equipo cuanto menos dudosa.

La última de ellas tuvo lugar este mismo fin de semana en el Gran Premio de Suzuka. Fernando Alonso tan sólo pudo ser octavo en esta carrera, y eso que remontó posiciones al salir desde la décima posición, en parte por culpa de las órdenes que recibió desde el pit lane. 

En el circuito japonés es muy complicado realizar adelantamientos y por eso desde Aston Martin quisieron anticiparse para ganar posiciones en boxes al parar en la vuelta 12, pero el movimiento no salió según lo esperado. Tras la parada, Fernando Alonso regresó a la pista en medio de un tráfico tremendo y eso en un circuito como Suzuka y con un coche como este Aston Martin parecía una sentencia definitiva a decir adiós a la pelea por unos puestos superiores.

Alonso salió por detrás de Esteban Ocon, al que intentó una y otra vez pasar sin éxito. "Me habéis tirado a los leones parándome tan pronto, increíble", espetó por la radio el español en un contundente mensaje. Lo hizo en la vuelta 21, cuando se daba una y otra vez contra el muro del que fuera su compañero en Alpine el año pasado. 

Más enfado

No se quedaron ahí los mensajes que Fernando Alonso le lanzó a su equipo directamente a boxes. La desesperación y la frustración del piloto español fue creciendo a medida que pasaban las vueltas y unos pocos giros después volvió a dirigirse a sus ingenieros.

Lo hizo en la vuelta 24 para exigir alguna solución a su equipo viendo que era imposible superar a un Ocon que le seguía frenando cuando tenía más ritmo en la pista. "Esteban Ocon se va en las rectas. ¡Pensad en algo!", exigió Fernando Alonso a su equipo en busca de una solución para una situación totalmente bloqueada.

Precisamente de eso se quejó también en sus declaraciones posteriores. "Nuestro DRS aún no es del todo efectivo, lo abrimos y el coche de delante se continúa yendo. Tenemos que mejorar en ese apartado", sentenció el excampeón del mundo.

Al final, Fernando Alonso pudo terminar en la octava posición. Lo hizo sobre todo gracias a una espectacular salida en la que partía desde la décima plaza y llegó a ser sexto. 

El asturiano lamentó, sin embargo, que las órdenes de equipo fueran pensando en defender una posición inferior cuando pensaba que tenía ritmo para quedar todavía más arriba: "La carrera ha sido buena, el coche ha ido más rápido de lo que yo pensaba. Estaba cómodo detrás de Ferrari y delante de Mercedes... Y de repente me han llamado y era demasiado pronto. Queríamos cubrir a Tsunoda y nuestra carrera no estaba ahí hoy, estábamos para otra cosa", sentenció.