Verstappen, el otro hijo de Michael Schumacher: "No diferenciaba entre él y Mick, Max se beneficia ahora de eso"
- La relación entre las dos leyendas del automovilismo que moldeó al piloto neerlandés dentro y fuera de las pistas, clave para sus éxitos en la Fórmula 1.
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La conexión entre las familias Verstappen y Schumacher nació en los años 90, cuando Jos Verstappen y Michael Schumacher compartieron equipo en Benetton durante la temporada de 1994. Aunque Jos no tuvo un papel estelar, la amistad entre ambos pilotos se consolidó, extendiéndose incluso a sus familias.
Cuando Max Verstappen llegó al mundo en 1997, Schumacher ya era una figura destacada en el automovilismo. Sin embargo, para el joven Max, no era el gran campeón que los fanáticos idolatraban, sino simplemente el "tío Michael". Esta relación cercana marcó profundamente al actual piloto de Red Bull, quien ha admitido que esas vivencias en su infancia lo influenciaron significativamente.
Según Jos, Michael no solo trataba a Max como un miembro más de la familia, sino que lo educaba junto a su propio hijo, Mick. "Si tenía algo que decir, lo decía a ambos. No diferenciaba entre Max y Mick", comentó Jos en una entrevista reciente. Este enfoque equitativo permitió que Max absorbiera valores y actitudes que hoy lo caracterizan en el automovilismo.
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— ann (@rdbullmax) July 10, 2021
Lecciones poderosas
Las familias Schumacher y Verstappen compartían vacaciones que, a menudo, giraban en torno a los motores. Desde temprano, Max estuvo inmerso en un entorno donde las carreras no eran solo un deporte, sino una pasión compartida. "Siempre íbamos a los karts en biplazas. Michael iba con Mick o Gina y mi padre conmigo", recordó Max, quien asegura que esas experiencias lo formaron tanto como piloto como persona.
Aunque Max era apenas un niño pequeño, esos momentos de karting le dejaron aprendizajes clave. Años después, su estilo de conducción y enfoque competitivo reflejan el impacto que tuvo crecer bajo la influencia de Schumacher. "Michael era amable, un hombre de familia muy grande. Nunca lo vi como un campeón de récords porque no era consciente de eso", confesó el neerlandés en una entrevista.
Incluso las barreras del idioma no fueron un obstáculo para la relación. Jos Verstappen comenzó a hablar alemán con Max desde una edad temprana, facilitando la comunicación con Schumacher y sus hijos durante esos encuentros familiares.
Forjando a un campeón
Hoy, Max Verstappen es uno de los nombres más destacados en la Fórmula 1, con cuatro títulos mundiales consecutivos en su haber hasta 2024. Su estilo agresivo, su capacidad de análisis y su espíritu competitivo han llevado a muchos a compararlo con Michael Schumacher. Estas similitudes no son casuales, ya que Max admite que mucho de lo que aprendió de niño proviene de los consejos y el ejemplo del legendario piloto alemán.
Aunque el éxito de Verstappen en la Fórmula 1 parece imparable, las dudas sobre el rendimiento de su equipo, Red Bull, para la temporada 2025 han hecho que incluso su padre sea cauto. "Red Bull necesita un coche más predecible en todas las condiciones. Si miras la segunda mitad de 2024, no puedes ser optimista", comentó Jos sobre las perspectivas de Max para sumar un quinto título consecutivo.
Con McLaren y Ferrari como los principales contendientes, y pilotos como Lewis Hamilton y Charles Leclerc en la lucha por el campeonato, el reto para Verstappen será más difícil que nunca. Sin embargo, el neerlandés confía en la preparación y las lecciones que recibió desde joven.
Un legado entre dos familias
El impacto de Michael Schumacher en la vida de Max Verstappen va más allá de lo deportivo. La relación entre ambas familias fue una mezcla de amistad, aprendizaje y respeto mutuo, dejando recuerdos imborrables para el piloto neerlandés. "Todavía tengo grandes recuerdos de esos fines de semana con Mick y Gina. Fue grandioso", señaló Max al recordar aquellos momentos compartidos.
Aunque Michael ya no aparece en público debido al accidente de esquí que sufrió en 2013, su legado sigue vivo no solo en la figura de su hijo Mick, sino también en la influencia que tuvo sobre Max. Ambos jóvenes pilotos, formados en entornos similares, representan el espíritu competitivo y la pasión por el automovilismo que sus padres compartieron.
La relación entre Michael Schumacher y Max Verstappen es un recordatorio de cómo las conexiones personales pueden moldear a una persona. Para Max, el "tío Michael" no fue solo una figura familiar, sino una inspiración que lo guió desde la infancia hasta convertirse en uno de los grandes nombres de la Fórmula 1 actual. Aunque Michael ya no esté presente en los paddocks, su influencia sigue viva en la actitud y los logros del piloto de Red Bull.