Primero habló dentro de la pista y después se despachó a gusto contra su compañero de equipo tras la monumental rajada de Valentino Rossi, en la que acusó a Marc Márquez de no jugar limpio y beneficiarle intencionadamente al ralentizar la carrera de Phillip Island para que le recortara el mayor número de puntos posibles. Il Dottore basó sus argumentos en que Márquez se la tiene jurada desde la caída en Termas (Argentina), cuando ambos peleaban por la victoria en la última vuelta, y hasta puso en duda que el piloto del equipo Repsol Honda tuviera un póster suyo en su habitación cuando era pequeño e idolatraba al italiano.
Lorenzo, estupefacto ante tales acusaciones, pasó a la acción en la primera jornada de entrenamientos del Gran Premio de Malasia y fue el más rápido (2:00.246). Una forma de callar la boca a su compañero de equipo, que no consiguió mejorar su crono matinal y finalizó en la quinta posición, a seis décimas. Y cuando llegó el momento de analizar la jornada ante los medios de comunicación, tampoco se mordió la lengua.
“Está claro que es una estrategia para intentar influenciar a los demás pilotos, sobre todo a Marc y a Iannone. Tiene un poco el miedo de que la falta de velocidad pueda complicarle las cosas para el campeonato. Lo que es extraño es que utilice esta estrategia o esta acusación contra Márquez cuando durante casi toda su carrera deportiva ha utilizado esa estrategia en las carreras, eso de jugar con sus rivales. Lo hizo con Gibernau, con Biaggi, con Barros, con Ukawa… Sigo pensando que Marc hizo su carrera. Si de verdad me quisiese ayudar para ganar el campeonato, no me hubiese pasado en la última vuelta y arriesgando como lo hizo”, recordó el piloto español de Yamaha, quien cree que las acusaciones de Rossi contra Márquez van a conseguir el efecto contrario al que busca Il Dottore que, según él, no actuó de forma inteligente.
“Le va a salir el tiro por la culata. Esa acusación tan fuerte no le va a sentar nada bien a Marc y puede ser que tenga el efecto contrario. Si me acusase tan fuertemente a mí, no sé cómo actuaría, pero no creo que muy bien”, remató Lorenzo, quien tiene que terminar por delante de su compañero de equipo en Sepang para poder llegar a la última cita de la temporada con opciones claras para proclamarse campeón del mundo de MotoGP.