Desde que Suzuki anunció hace un mes la contratación de Andrea Iannone para las dos próximas temporadas, una noticia de la que se enteró por boca de sus mecánicos cuando llegó al circuito italiano de Mugello, Aleix Espargaró era consciente de que la fábrica de Hamamatsu no iba a contar con él en el futuro.
Por eso comenzó a sopesar el mercado para buscar un hueco en un equipo de fábrica de MotoGP para la próxima temporada, aunque también le llegaron ofertas de Superbike. Al final el piloto español correrá en Aprilia, después de que la fábrica de Noale haya anunciado su contratación para las dos próximas temporadas para entrar en los planes de desarrollo del prototipo y aumentar su competitividad.
El mayor de los hermanos Espargaró compartirá plaza en el equipo gestionado por Fausto Gresini con el británico Sam Lowes, que el próximo miércoles se subirá por primera vez a la Aprilia RS-GP en el circuito de Misano.
De esta forma, el equipo italiano prescindirá de su actual pareja de pilotos. Álvaro Bautista se encuentra negociando su fichaje por la escudería de MotoGP de Jorge Martínez Aspar, que podría anunciarse dentro de tres semanas en el trazado alemán de Sachsenring.
Mientras, el alemán Stefan Bradl tiene muy complicado continuar en la clase reina la próxima temporada tras la llegada a MotoGP de su compatriota Jonas Folger, que se enrolará en las filas del equipo Tech3 Yamaha, y ahora busca acomodo en el campeonato del mundo de Superbike.