La Federación Internacional de Piragüismo (ICF, por sus siglas en inglés) ha resuelto este miércoles que el español Javier Hernanz es el ganador de la medalla de bronce en K1 5.000 metros en el Campeonato del Mundo de Esprint 2018, tras la renuncia al metal del noruego Eivind Vold, que acabó tercero.
"Nos gustaría confirmar que la Junta Directiva de la ICF ha acordado hoy aceptar la propia evidencia de Eivind Vold en la carrera de K1 5.000 metros en el Campeonato del Mundo 2018 y los resultados serán modificados para otorgarle a España la medalla de bronce", explica el comunicado remitido hoy por el organismo internacional a la Federación Española de Piragüismo.
El texto, que firma el secretario general de la ICF, Simon Toulson, añade que se enviará la medalla a España "para una ceremonia apropiada". También informa de que evaluarán "un reconocimiento adecuado para el juego limpio de Eivind y el equipo de Noruega", según el escrito facilitado por la Federación Española.
El palista noruego había renunciado este martes a su medalla y posición y reconocido a Hernanz como merecedor del bronce en un escrito remitido a la ICF. "Reconozco a Javier Hernanz como legítimo ganador del tercer puesto, ya que nadie se dio cuenta del error que cometí cuando no pasé por la sexta boya en el último giro correctamente", admitió Vold.
En los días previos, la Federación Noruega y el propio palista enviaron otro escrito a la ICF en el que pedían la descalificación de Vold en favor de Hernanz, al que también le solicitaban disculpas por "no darle el placer de estar en el podio y recibir la medalla de bronce enfrente del público español".
El documento, que concluía con la frase "por un juego limpio y justo", relataba que Vold "nunca vio la sexta boya y fue derecho desde la quinta hasta el final de línea. Si Vold o Larsen -jefe del equipo noruego- hubieran sabido que la sexta boya fue pasada incorrectamente, hubiésemos aceptado la descalificación".
Uno de los jueces sancionó la infracción del noruego, que fue descalificado, por lo que el bronce correspondía a Hernanz, quien figuró durante unos minutos en la clasificación oficial como tercero "y caminaba hacia el podio en la ceremonia de premiación cuando una revocación de la decisión anterior le volvió a dejar fuera del medallero", recuerda la Federación.
La medalla del palista asturiano amplia a seis el botín logrado por la delegación española en los mundiales disputados en la localidad portuguesa de Montemor-o-Velho.
Al éxito de Hernanz se unen otros cinco podios de la selección, el oro en K1 200 ganado por Carlos Garrote; tres platas en K2 200 con Saúl Craviotto y Cristian Toro, en K2 1.000 con Cubelos y Peña y en K4 500: Saúl Craviotto, Cristian Toro, Marcus Cooper y Rodrigo Germade, y el bronce en K4 1.000 conseguido por Paco Cubelos, Pelayo Roza, Rubén Millán e Iñigo Peña.