Tulsi Gabbard, del surf a la Casa Blanca: la amenaza para Donald Trump en 2020

Deporte y política en numerosas ocasiones han ido de la mano a lo largo de la historia. El último caso es el de Tulsi Gabbard. Surfista criada entre las olas de Hawái, esta mujer de 37 años fue la primera persona de descendencia hindú en ocupar una silla en el Congreso de los Estados Unidos y se prepara para el asalto a la Casa Blanca en las elecciones que tendrán lugar en 2020.

Tulsi Gabbard nacía el 12 de abril de 1981 en Samoa. Su familia se trasladó a Hawái cuando ella tan solo tenía dos años y fue allí donde se crió. Aunque en la actualidad ha tenido que dejar el archipiélago del Pacífico Central para instalarse en Washington DC debido a su carrera política. Antes de eso se licenció en la Universidad del Pacífico de Hawái en Administración de Empresas.

Comprometida con el medio ambiente y en favor del aborto, Gabbard suele escaparse de Washington para poder practicar el surf en su tierra natal. La congresista ha sorprendido con su iniciativa para ser candidata del partido demócrata a la presidencia de los EEUU en el año 2020. Tulsi Gabbard quiere poner fin a la hegemonía de Donald Trump y para ello ya se ha iniciado todo un movimiento en favor de la surfista tanto en las redes sociales como en todo el país norteamericano.

Pasado en el ejército

Gabbard está enfocada en su carrera política, pero también demostró su patriotismo sirviendo en la unidad médica de campo de la Guardia Nacional de Estados Unidos. De 2004 a 2005 estuvo destinada en Irak, después fue enviada especial en Kuwait. Al finalizar su servicios en tierras iraquíes, recibió la Medalla de Servicio Meritorio.

La ahora veterana fue, a sus 21 años, la persona más joven en ser electa en el Estado de Hawái y, a su vez, también fue el primer funcionario en renunciar a su cargo de forma voluntaria para servir en una zona de guerra. Una mujer hecha a sí misma que hizo historia en 2007 al ser la primera en los 50 años de la Escuela de Candidatos Oficiales en la Academia Militar de Alabama en graduarse con honores.

Tulsi Gabbard junto a otros militares. Foto: Twitter (@TulsiGabbard)

Espíritu 'Aloha' y el surf

Tulsi Gabbard nunca ha ocultado que se metió en política para apoyar políticas en favor del medio ambiente. Su preocupación por el cuidado del planeta va en consonancia con el espíritu 'Aloha' del que presume en sus redes sociales y comparecencias públicas. La protección de oceános y mares son uno de los puntos candentes de su programa y ya ha bromeado con que más gente de Washington debería optar por surfear más.

La congresista demócrata habla de ese espíritu 'Aloha' como el compromiso de servir que deben tener los políticos como regla principal: "Como servidores públicos, se nos ha encomendado la responsabilidad de tomar decisiones y tomar medidas para impactar positivamente en las vidas de otros. Vivir 'Aloha' no es algo que podamos dar por sentado. Es una elección consciente que debe hacerse. Todos los días. Para mantenernos enfocados y centrados en nuestro propósito. Se utiliza como hola y adiós, pero su significado real es mucho más que eso. Se trata de estar presente y reconocer el aliento de la vida en los demás".

Tulsi Gabbard practicando surf. Foto: Twitter (@TulsiGabbard)

El espíritu del surf y de 'Aloha' "no es solo un sentimiento dice Tulsi Gabbard: "Es una fuerza poderosa que nos motiva a tomar medidas para el bienestar de los demás y de nuestro país. La división, el odio, el fanatismo y la codicia han ensombrecido nuestro país y gran parte de nuestra política. 'Aloha' es lo que nuestro país y el mundo necesitan ahora más que nunca".

Sus escapadas a Hawái para poder practicar su deporte favorito no es un mito. Ella misma ha asegurado que su primera parada al volver a casa es "el océano". "Cada vez que salgo del agua me siento inspirada, me siento motivada", ha comentado la congresista demócrata.

Gabbard podría convertirse en la primera mujer en presidir los Estados Unidos de América y es la lucha por visibilizar a las féminas en el mundo del deporte y del surf la que le están dando un particular respaldo. La política ha apoyado varios campeonatos femeninos de surf e incluso se unió a las competidoras en la ceremonia de apertura del primer evento para mujeres que se celebró en la bahía de Waimea.

Pese a no haberse dedicado de forma profesional al surf, sí que lo practica de forma regular desde la adolescencia, una forma de vivir el deporte a la que se unen las artes marciales. Esa pasión por las olas la comparte con su marido Abraham Williams. Él se dedica a la fotografía y filma los vídeos de campaña de la congresista. Williams confirmó hace unos meses que su amor por el surf les unió después de pasar muchas jornadas juntos subidos a sus tablas. De hecho, él propuso matrimonio a Gabbard mientras practicaban surf y es habitual que en fechas señaladas ambos compartan fotos juntos en el mar con sus tablas.

Objetivo la Casa Blanca

Fue en una en la CNN cuando Gabbard hizo oficial su intención de presentarse a las elecciones presidenciales de EEUU -las cuales tendrán lugar en el mes de noviembre del año 2020-. Su propósito fue de lo más comentado en las redes sociales e incluso al once veces campeón del mundo de surf, Kelly Slater, dio 'me gusta' a la publicación.

Tulsi Gabbard, 2020. Foto: Twitter (@TulsiGabbard)

Tulsi Gabbard no tendrá nada fácil la carrera a la Casa Blanca. Por parte del partido demócrata suenan otros candidatos con una mayor experiencia como Joe Biden, Bernie Sanders o Beto O'Rourke, aunque el nombre de esta surfista, veterana de guerra y política comienza a ganar enteros para pelear de tú a tú con el polémico y discutido líder del partido republicano, Donald Trump.

Para llegar hasta esas elecciones del 3 de noviembre de 2020 antes deberá superar las primarias del Partido Democráta. La dilatada trayectoria de Biden, Sanders y O'Rourke juega en su contra. El primero de ellos fue vicepresidente de EEUU desde el 2009 al 2017, bajo el mandato de Barack Obama. No compitió en las elecciones del 2016 debido al fallecimiento de su hijo Beau Biden en octubre de 2015. Pero ahora no se descarta que sea uno de los candidatos de cara a 2020.

Por su parte, Bernie Sanders es senador junior por el Estado de Vermont. Pese a ser demócrata es considerado como el independiente con más antigüedad en la historia del Congreso de los Estados Unidos. Comparte con Joe Biden su oposición a la guerra de Irak y es famoso por su política en la lucha por los derechos civiles. En 2016 ya fue uno de los candidatos demócratas pero fue derrotado en las primarias por Hillary Clinton.

Beto O'Rourke es el más joven de este trío. A sus 46 años es congresista por Texas, pero su presencia en las primarias del Partido Demócrata todavía no está asegurada, ya que él mismo ha dicho que después de la campaña para el Senado sufre síntomas de agotamiento y su decisión final sobre optar a la presidencia podría alargarse durante varios meses.

Tulsi Gabbard

Una mujer, presidenta del mundo libre

A lo largo de toda la historia de EEUU nunca una mujer se ha sentado en el despacho oval. Tulsi Gabbard debe protagonizar una carrera ya que tiene que darse a conocer, objetivo en el que todo su equipo se ha puesto manos a la obra desde hace varias semanas, siendo las redes sociales un especial motor para colocarse en cabeza. Sin embargo, no solo la congresista por Hawái ha soñado con ser la primera mujer presidente.

Hillary Clinton ya lo intentó en su día y ahora otros nombres como los de Michelle Obama, Kamala Harris o incluso el de la televisiva Oprah Winfrey han sonado en las quinielas. Pero si hay una candidata firme esa es Elisabeth Warren. La senadora del ala progresista del Partido Demócrata ya ha anunciado que ha formado un comité exploratorio para su candidatura a las elecciones a la presidencia del 2020.

Warren ya ha tenido algún enfrentamiento público con Donald Trump, quien llamó a la senadora por Massachusetts 'Pocahontas' por su supuesta ascendencia nativa. Mientras formaba parte de la campaña de Hillary Clinton en 2016, Elisabeth Warren acusó al ahora presidente de estar movido por la avaricia y el odio. Así, la surfista Tulsi Gabbard tiene competencia, pero un sueño intacto: presentar guerra a Trump en noviembre de 2020.

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