El español J.J. Arcega, de Zaragoza a hacer historia en la NFL: el principio de una leyenda
El receptor de los Philadelphia Eagles comenzó su trayectoria profesional en la liga de fútbol americano con el objetivo de ser uno de los rookies del año.
29 septiembre, 2019 00:23Noticias relacionadas
José Joaquín Arcega-Whiteside (22 años, Zaragoza) hizo historia el pasado mes de abril al ser elegido en la segunda ronda del Draft de la NFL, en el número 57, por los Philadelphia Eagles. Más conocido como J.J. en Estados Unidos -pese a que en su camiseta luce sus apellidos-, el español comienza su primera campaña en la liga de fútbol americano y lo hace después de marcar muy buenos números en la pretemporada.
Ya antes de ser drafteado, J.J. Arcega era considerado por los expertos como uno de los wide receivers con mayor proyección. Su nombre traspasó fronteras ya que el maño se ha convertido en el segundo español en jugar la NFL, ya que desde hace varios años milita allí Alejandro Villanueva.
Fue en la pretemporada cuando el español comenzó a destacar en su equipo. En el partido entre los Philadelphia Eagles y los Baltimore Ravens, consiguió su primer touchdown como jugador de la NFL, aunque en partido no oficial todavía, y acabó siendo uno de los más destacados de la franquicia de Pennsylvania gracias a sus ocho recepciones y 104 yardas.
El día que nunca olvidará
Ya hace varias semanas que dio comienzo en Norteamérica una nueva temporada de la NFL. Y fue entonces, el domingo 8 de septiembre, cuando tuvo lugar el debut en partido oficial de Arcega-Whiteside como jugador de la mejor liga de fútbol americano del planeta. Los Eagles se llevaron su primera victoria del curso ante los Washington Redskins por 32 a 27.
Hubo que esperar hasta el último cuarto para ver al receptor español en acción. Sin apenas protagonismo en los minutos que estuvo sobre el emparrillado, pero con mucho que dar y crecer de aquí al final de la temporada. En el punto de mira está convertirse en el novato que consigue más touchdowns en la historia de los Eagles, una marca que ostenta Calvin Williams y que data del año 1990, cuando logró 9 en su primer año.
Más ambicioso es poner el foco en el año que hizo Randy Moss en 1998. El entonces novato de los Minnesota Vikings realizó la mejor primera temporada que se le recuerda a un rookie en la posición de wide receiver. En total logró 17 touchdowns, 69 recepciones y 1.313 yardas en los 16 partidos que llegó a disputar aquel curso. Superarle, haría entrar a J.J. Arcega Whiteside en la historia del deporte y de la NFL. Por el momento, irá paso a paso para contar cada vez con un rol de más peso en los Eagles.
Deportista de cuna
No es casualidad que Arcega-Whiteside sea un deportista de élite ya que como se suele decir: 'de casta le viene al galgo'. Sus tíos, Fernando -medalla en los Juegos Olímpicos de Los Ángeles 1984- y Pepe -base internacional-, fueron jugadores profesionales de baloncesto, así como su padre Joaquín, quien jugó en el Helios, pero también en lugares como La Coruña y Andorra antes de retirarse en Lisboa. Por último, pero no menos importante, Valorie Whiteside, su madre, también se dedicó al baloncesto de forma profesional en el Cajalón.
La familia Arcega-Whiteside abandonó España para comenzar una nueva vida en Estados Unidos cuando JJ tan solo tenía 7 años. Es allí donde comenzó su carrera deportiva, aunque en sus inicios no se dedicó al fútbol americano, sino dio sus primeros pasos, siguiendo la tradición familiar, en el mundo del baloncesto. Pero pronto cambió la pelota de basket por el óvalo hasta que las universidades comenzaron a rifárselo.
Fue la prestigiosa Universidad de Stanford la que consiguió llevarse a un buen estudiante y a uno de los receptores con mayor proyección por aquel entonces. Después de graduarse en Relaciones Internacionales le llegó la hora de presentarse al Draft 2019 y de ahí a formar parte del equipo que ganó la Super Bowl en el año 2018. Para llegar hasta aquí, empató un récord histórico de su universidad -14 touchdowns en una temporada- y firmó en total 28 touchdowns y 2.219 yardas. El español es un serio candidato a hacerse con el rookie del año en la NFL.