Armand Duplantis se ha convertido este año en la referencia absoluta del salto con pértiga. El saltador sueco se ha puesto a la cabeza de todos los récords y ya muchos aguardan con especial interés su rendimiento en las mejores pruebas de un deporte que está viviendo una nueva dimensión con el naciomiento de este joven talento de 20 años que ha devuelto a la pértiga a la primera plana.
El que muchos consideran ya como el sucesor de Sergei Bubka, considerado el mejor saltador de todos los tiempos, está realizando un 2020 sencillamente perfecto y que le está permitiendo escribir en letras doradas su nombre en la historia del deporte mundial y en especial de su disciplina.
'Mondo', como familiarmente se conoce a este chico de 20 años que ha conseguido convertirse en el rey del salto con pértiga, ha borrado el último gran récord de Bubka, o, mejor dicho, ha escrito su nombre por encima de el del mítico saltador ucraniano, que se ha visto obligado a rendirse ante la nueva sensación del deporte sueco. Además, Duplantis ha conseguido dotar a la pértiga de una mediaticidad pocas veces vista hasta ahora, ya que el carisma y el desparpajo del sueco, a pesar de su corta edad, han convertido sus competiciones en todo un espectáculo, haciendo que sean seguidas cada vez por más gente.
El adiós definitivo de Bubka
La última gran hazaña de Armand Duplantis ha sido superar un antiguo récord de Sergei Bubka. Un récord que quizás carecía de una cierta autenticidad moral porque no estaba considerado como una heoricidad, aunque sí se trataba de una marca nunca antes superada por nadie. Y eso era un reto ineludible para el chico que posee el salto con pértiga más poderoso de la historia.
Además, superar este récord suponía también un severo correctivo a los críticos y a los nostálgicos, a esos que empeñan en negar el avance y la evolución de la sociedad y, como tal, del deporte, considerando siempre que cualquier tiempo pasado fue mejor. Por ello, Duplantis se ha propueso terminar con cualquier vestigio de historia que no haya sido escrita por él.
La última gran hazaña de Armand Duplantis ha sido superar el mejor salto con pértiga al aire libre jamás dado, obra de Sergei Bubka, que alcanzó una altura de 6 metros y 14 centímetros. No era el mejor salto del ucraniano, ya que elevó el que fuera en su día récord del mundo hasta una altura de 6,15 metros, pero nadie jamás había conseguido saltar más que él al aire libre. Al menos, que se sepa con una cierta oficialidad.
Por eso, Duplantis se propuso superar este antiguo récord de Bubka y que, para muchos, era el gran escollo que tenían ante sus ojos para creerse que este chico va en serio a comerse el mundo. Por ello, en una cita tan importante como la Diamond League, y un suelo tan emblemático como el italiano, la reunión se celebraba en Roma, Duplantis llevó a cabo su gesta, elevando al cielo de la ciudad eterna hasta firmar una altura de 6 metros y 15 centímetros en lo que desde ese momento era el mayor salto jamás dado al aire libre. Y, de esta forma, el sueco borraba definitivamente del libro de los récords al mítico Sergei Bubka.
Un salto para la historia
El día 8 de febrero del año 2020, Armond Duplantis se encontraba en Torun, Polonia, dispuesto a cambiar la historia de un deporte que no cuenta actualmente con mucho protagonismo de los medios. Sin embargo, un joven de nacionalidad sueca, pero criado en Luisiana, se propuso ser noticia al día siguiente y hasta abrir telediarios con una gesta de otro mundo, superar el mítico récord del mundo del francés Renaud Lavillenie.
El galo tenía su mayor actuación, el que hasta ese momento era el mejor salto de la historia y que había roto la supremacia de Bubka, en una altura de 6 metros y 16 centímetros, logrado en una pista cubierta. Sin embargo, a partir de aquel día del mes de febrero, su legado quedaría empañado para siempre por una irrupción estelar llegada desde Suecia.
Duplantis realizó un salto colosal firmando una altura de 6 metros y 17 centímetros que le sirvieron para volverse completamente loco al saber que se había convertido en el nuevo rey del salto con pértiga firmando el récord del mundo. Sin embargo, su ambición y su hambre no tienen límites, y por eso no se detuvo ahí.
Solo unos días después, en una semana que fue dorada para él, pero esta vez desde Glasgow, decidió volver a ponerse a prueba con el claro objetivo de aprovechar su excelso momento de forma para volver a derribar el listón de la historia, pero antes saltar por encima de él con su pértiga. Y Duplantis logró lo que se había propuesto. Tan solo unos días más tarde de haber firmado el récord del mundo, 'Mondo' logró volver a batir su registro y llegar hasta la mítica cifra de 6 metros y 18 centímetros, resultado que sigue siendo a día de hoy la cifra a batir.
Un talento precoz para dominar el mundo
A pesar de que Duplantis es hoy toda una institución en el mundo del deportes y que la disciplina del salto con pértiga lleva asociada su nombre y su foto, este atleta nacido en Estados Unidos, pero de nacionalidad sueca gracias a la influencia de su madre, la heptatleta Helena Duplantis, ha venido pisando fuerte desde muy pequeño. Los que conocen sus más tiernos orígenes saben que 'Mondo' se trata de un talento precoz llamado a dominar el mundo, pero que ya ha conseguido grandes logros empezando desde muy abajo.
Su primera gran victoria llegó en el año 2015, cuando se proclamó Campeón del Mundo sub18. Con tan solo 15 años, fue capaz de competir contra chicos mucho mayores que él para proclamarse vencedor en una competición que se había celebrado en Cali, Colombia, y que había visto como un talento tan precoz era capaz de presentar una aptitudes y unas cualidades tan únicas para firmar un salto colosal de 5,30, récord de la competición. En aquella cita en el país cafetero había nacido una joya.
Tan solo un año más tarde, en 2016, Duplantis se propuso una meta aun todavía mayor, competir con gente muy superior a su edad, por eso embarcó en la aventura del campeonato mundial sub20. En aquella competición celebrada en Polonia, Duplantis consiguió subirse al podio para morder una medalla de bronce que a cualquier otro le hubiera sabido a gloria, pero que a él solo le hizo tener más ganas de venganza, a pesar de que en tan solo un año había conseguido mejorar todas sus marcas.
Por ello, al año siguiente, en 2017, se presentó al Campeonato de Europa sub20, cuando solo tenía 17 años. Sin embargo, aquella vez, y también en suelo italiano, concretamente en Grosseto, Duplantis se subió hasta el escalón más alto del podio y volvió a saborear las mieles de un gran éxito, proclamándose vencedor de la competición, además de firmar el mejor salto del certamen con un registro de 5 metros y 60 centímetros, es decir, 30 centímetros más que tan solo 2 años antes.
Tal había sido su progresión y su éxito que Duplantis decidió probar suerte al más alto nivel participando en el Campeonato del Mundo de categoría absoluta, en el que firmó un meritorio noveno puesto. Con tan solo 17 años ya había sido campeón sub20 y había lorgado firmar un Top10 entre los atletas de categoría élite. Había llegado un fenómeno.
Un año más tarde, en 2018, llegó el año más importante de su carrera hasta este 2020 que lo ha elevado al Olimpo. Con tan solo 18 años, Duplantis volvió a presentarse a un Campeonato del Mundo, esta vez en pista cubierta, donde mejoró su resultado obteniendo un gran octavo puesto en Birmingham. No obstante, sus grandes triunfos llegaron después.
En el mes de julio llegó a Tampere, en Finlandia, donde se alzó con la corona de Campeón del Mundo sub20, un título que se le había resistido anteriormente. Sin embargo, su mayor éxito no sería ese, sino que sería su primera gran victoria absoluta. Un mes después, en el mes de agosto y en Berlín, Duplantis participó y ganó el Campeonato de Europa de categoría absoluta en lo que ha sido su mayor logro hasta el momento.
Además, en aquella competición, consiguió firmar el mejor salto de todos los deportistas que participaron con un registro de 6,05, lo que le supuso tener el récord del mundo en la categoría sub20 y firmar un resultado que le habría servido para coronarse como campeón olímpico en Río de Janeiro 2016, donde el oro del mítico Thiago Braz estuvo en una altura de 6,03. Duplantis ya estaba en números de récords olímpicos.
Una batalla contra la historia en solitario
Armand Duplantis ya es considerado como uno de los mejores saltadores de la historia. O, incluso, podría ser considerado como el mejor, ya que, al menos por marcas, sí lo es. Sin embargo, a 'Mondo' le queda el reto y la dificil papeleta de reflejar con éxitos y con títulos esta superioridad que ya ha manifestado con récords. Por eso, salir victorioso en las grandes pruebas de la temporada son su asignatura pendiente ahora.
En el año 2019 no se puedo proclamar Campeón del Mundo en categoría absoluta, ya que quedó segundo tras el mítico Sam Kendricks. Esa medalla de plata, ganada a una temprana edad, le sirve para ponerse nuevas metas en un futuro que debería ser suyo a poco que confirme lo logrado en este 2020 y lo que venía transmitiendo desde su niñez.
Todo hace indicar que será cuestión de tiempo, pero lo críticos, que siempre los hay, ya le piden a Duplantis que certifique con medallas su inmenso poderío. Por ello, coronarse como Campeón del Mundo, algo que no pudo conseguir en Doha, ya es una de sus grandes obsesiones.
Y también lo es coronarse en el mayor evento del deporte, un evento en el que tenía puestas muchas esperanzas para este verano y que debido a la maldita crisis del coronavirus no ha podido celebrarse. Este verano, Tokio y los Juegos Olímpicos de 2020 iban a haber sido testigos de una batalla épica por la medalla de oro y quien sabe si por algo más. Lo que estaba claro es que Duplantis tenía esa fecha marcada en rojo en el calendaro y que iba a ir a por todas para celebrar su primer gran logro, además del Campeonato de Europa. En Japón le esperaba una batalla sin cuartel frente a saltadores de la talla de Renaud Lavillenie, Thiago Brazo o Sam Kendricks. Y, casi con total seguridad, la cáida del récord olímpico.
Porque esa es la otra gran batalla que tiene que lidiar Duplantis, una batalla con la historia. El récord del mundo actual ya es suyo, pero en sus manos está establecer un legado que puede ser imborrable, al menos por mucho tiempo. Ya ha demostrado ser capaz de saltar más que nadie, pero ahora compite contra sí mismo y por eso tiene que demostrar que es capaz de saltar más que el propio 'Mondo'. Superar una y otra vez el récord del mundo hasta encontrar su límite está al alcance de su mano.
[Más información - El caso de Elena Díaz y los deportistas que prefieren competir con mascarilla: así afecta a su rendimiento]