La nueva Ley del Deporte vuelve al pasado: ya no obligará a los clubes profesionales ser una SAD

España está un paso más cerca de tener una nueva Ley del Deporte. Este viernes el Consejo de Ministros ha aprobado el anteproyecto de un texto sobre el que se viene trabajando desde 2019. Después de varios cambios al frente del ministerio y del Consejo Superior de Deportes, Miquel Iceta ha conseguido sacar adelante estos cambios que van de la mano con la política de igualdad que persigue el Gobierno y también incluyen algunas novedades.

Una de las piedras angulares de la reforma y que la pandemia puso en el debate nacional es el estatus, derechos y obligaciones de las personas deportistas. Que algunos profesionales no pudieran salir de sus casas para ejercitarse durante el peor momento de la Covid-19 fue la evidencia necesaria para cambiar esta situación. Desde que se apruebe en el Congreso, todos ellos tendrán un reconocimiento que se equilibra con respecto a otros países.

El mundo del fútbol es el que recibe una de las novedades más inesperadas y sorprendentes. Aunque se aplica a cualquier competición profesional, el hecho de que deje de ser obligatorio que, salvo Real Madrid, FC Barcelona, Athletic Club y CA Osasuna, las entidades sean Sociedad Anónima Deportiva supone una vuelta al pasado. Esta norma que se estableció en 1990 "ha demostrado su ineficacia a raíz de las múltiples crisis".

La otra clave del nuevo texto pasa porque ahonda en una profunda reforma en materia de igualdad y de los derechos de las personas LGTBIQ+. El anteproyecto de Ley parte de la premisa de que el deporte no puede ser considerado un sector exclusivamente masculino que vete el acceso de las mujeres a puestos de responsabilidad. Además, atiende específicamente a la polémica que ha surgido en los últimos años con respecto a las personas Trans.

Las S. A. D.

La nueva Ley elimina la obligación de transformación en S. A. D. para participar en competiciones profesionales. El texto que se remonta a la etapa de José Guirao y María José Rienda y que ha incluido varias modificaciones atiende a la petición de muchos clubes que se encontraban con la obligación de recaudar importantes sumas de dinero en muy poco tiempo para poder competir en La Liga o la ACB.

Desaparece la obligatoriedad del aval del 15% del presupuesto para los clubes que no sean S. A. D., pudiendo establecer las entidades el porcentaje de aval que crean oportuno. "Los avales quedan en manos de los clubes. La actividad deportiva se vertebra a través de clubes y federaciones, que son entidades privadas y han de ser ellos los que decidan de qué mejor manera garantizar sus intereses", explicaba el ministro Iceta.

El texto también establece medidas de gobernanza y transparencia, y la obligación de contar con mecanismos de control económico para las ligas profesionales. En concreto se recoge "que las ligas profesionales aprobarán un plan de control económico, cumpliendo los términos y criterios que determine el Consejo Superior de Deportes, que prevenga la insolvencia de las entidades deportivas que participan en la competición. Dicho plan incorporará mecanismos de fiscalización económica en los términos que establezcan sus estatutos y reglamentos internos".

En el caso de LaLiga, ya existía, pero lo novedoso es que la normativa será aplicable en la Liga Ellas, la nueva competición profesional del deporte español a partir de la próxima temporada. Dentro de estos casos de nuevos torneos, también se acaba con la opción de crear la denominación de liga profesionalizada, ese punto intermedio entre lo profesional y lo no profesional que creaba más confusión que ayuda.

En clave LGTBIQ+

La nueva Ley también atiende los derechos de las personas LGTBIQ+: eliminando cualquier discriminación y promoviendo que el acceso y la práctica deportiva se realicen siempre con pleno respeto al principio de igualdad. "Las leyes tiene como objetivo establecer justicia y proteger a todos aquellos que sufren desamparo. Con la inclusión del colectivo LGTBIQ+ en el texto así lo hacemos. Una vez más, España elabora una de las leyes más modernas y progresistas de toda Europa en esta materia", explicaba José Manuel Franco, presidente del CSD, este verano.

El texto viene a apoyar la posición que se ha tomado desde los organismos internacionales para la inclusión de los deportistas Trans en las competiciones. Eso sí, en el mes de noviembre el Comité Olímpico Internacional, que servía hasta el momento como faro de muchos Estados y competiciones, se ha desentendido de regularizar esta situación y ha eliminado los requisitos formulados en 2015 especificando que se deberá evitar que haya una "desventaja desproporcionada" para evitar que se excluya a deportistas por su "identidad de género".

Queda conocer la letra pequeña para establecer de forma clara por dónde pasarán las líneas de actuación. Esta puede pasar por la modificación de la ley de 2007 contra la violencia, el sexismo, el racismo, la xenofobia y la intolerancia en el deporte para que recoja de manera expresa "la discriminación por razón de orientación sexual, identidad sexual, o expresión de género". Lo más importante será ver la consideración a la hora de incluir en las competiciones de hombres y mujeres a los trans.

Igualdad

También se establecen medidas para que las entidades públicas y privadas equilibren la presencia de mujeres en sus órganos directivos, así como la obligación de federaciones y ligas profesionales de realizar un informe anual en materia de igualdad. Una igualdad que, como novedad, también se llevará hasta la televisión, pues se equipara al 50% la difusión de eventos deportivos masculinos y femeninos en los medios de comunicación.

Se obligará a las entidades deportivas a tener un protocolo de prevención y actuación para situaciones de discriminación, abusos y acoso sexual o por razón de sexo. 

Así como se busca reducir la merma de derechos de las mujeres deportistas al quedar embarazadas, manteniendo el voto en las asambleas generales y conservando sus derechos como deportistas de alto nivel una vez transcurrido este periodo. "El legislador no podía ignorar el desamparo legal de las mujeres deportistas en situación de embarazo ante la pérdida de ayudas y subvenciones bajo el pretexto de no haber competido", explica el texto.

En el texto que debe contar con la aprobación en el contexto también se incluyen medidas de inclusión para el deporte adaptado en las federaciones deportivas, se mantienen los mandatos ilimitados en las federaciones e instará al Gobierno a construir y remodelar complejos deportivos para albergar eventos estatales y, también, internacionales. En definitiva, se trata de modernizar una ley que se circunscribía en una sociedad que ha cambiado mucho en 30 años.

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