Nick Sirianni y Mike McCarthy, en peligro de despido: en la NFL perder sí tiene consecuencias

La ronda de Wild Card de la NFL ya está en los libros y más allá de la confirmación de CJ Stroud y Jordan Love como quarterbacks ganadores o prepararnos otro clásico de los últimos años entre Patrick Mahomes y sus Chiefs y Josh Allen y los Bills, nos ha vuelto a recordar que ningún entrenador tiene el trabajo asegurado en la NFL.

Nick Sirianni está en duda en los Eagles tras la debacle de las últimas ocho semanas apenas once meses después de llegar a la Super Bowl. Y Mike McCarthy se da por amortizado en Dallas luego de la vergüenza contra los Packers pese a ser el único entrenador en la historia de los Cowboys en tener tres temporadas consecutivas de doce victorias.

En última instancia, la NFL siempre nos recuerda que el crédito es efímero y que nadie está mucho tiempo a salvo si no gana el último partido del año cuando las expectativas son esas.

Nick Sirianni, el entrenador de los Eagles. REUTERS

El colapso de los Eagles

Los Philadelphia Eagles confirmaron su implosión el lunes por la noche en Tampa en una humillante derrota por 32-9. El vigente campeón de la NFC cierra una temporada en la que solo valía ganar la Super Bowl con seis derrotas en los últimos siete partidos y muchos síntomas de disfunción en los últimos dos meses de competición tras empezar con un mentiroso 10-1 la temporada.

Nick Sirianni degradó a su coordinador defensivo en el último tercio de la temporada para promocionar a un memeable Matt Patricia, que tampoco ha dado con la solución. La debacle de la defensa en Tampa fue elocuente y seguramente una mezcla de falta de talento, de preparación y de actitud.

Los Eagles tuvieron una tasa de fallo en placajes del 21,3%, el 62% de las yardas de pase de los Buccaneers vinieron después de la recepción y el 82% de las terrestres fueron tras el primer contacto. En los últimos ocho partidos han promediado 404 yardas en contra y han sido en todos los parámetros de estadística avanzada de las cinco peores defensas de la NFL.

Ofensivamente la impotencia de la unidad fue también palpable contra Tampa. Los Eagles no pudieron correr y en ningún momento pudieron aprovechar la agresividad de la defensa local. Jalen Hurts y su ofensiva se fueron de Florida con 0-9 en conversión de terceros downs.

Los Buccaneers utilizaron el blitz un 69% de las jugadas y en el 37% algún jugador llegó a Hurts sin ser tocado. Ni la banda, que llamó un paquete de jugadas absolutamente predecibles, ni el quarterback, encontraron ninguna solución en toda la noche. Para Chris Simms, analista de NBC, el colapso de estos Eagles en los últimos dos meses de la temporada es el más grande jamás visto en un equipo de este (supuesto) talento. Sirianni está en la cuerda floja.

Y Dallas, ¿qué?

Jerry Jones, histriónico y legendario propietario de los Cowboys, calificó la humillación que su franquicia sufrió a manos de los Green Bay Packers como "la derrota más dura de su carrera". Con Jones perder, y perder así, sí que tiene consecuencias y en Dallas se da por terminada la era Mike McCarthy después de otra derrota decepcionante en playoff.

La marca en la postemporada es de 1-3, con dos salidas prematuras en Wild Card ejerciendo como locales tras temporadas de doce victorias. Lo del domingo por la noche fue un aplastamiento sin paliativos a ambos lados del balón y esta semana podría haber noticias.

Mike McCarthy, entrenador de los Cowboys. REUTERS

Si mezclamos las dudas yendo hacia delante de Dallas y Philadelphia con sus entrenadores con el hecho de que Bill Belichick, Mike Vrabel y Jim Harbough están ahí fuera libres y en búsqueda de equipo, los próximos días serán divertidos en el carrusel de entrenadores de la NFL. Probablemente jamás el mercado nos dio a tres entrenadores de ese nivel libres y a dos contendientes de Super Bowl quizás queriendo explorar nuevas rutas tras salidas decepcionantes en playoff.