Más de un mes después de recibir un ataque frontal, Rafael Nadal ha reaccionado como prometió. El mallorquín ha interpuesto una demanda contra Roselyne Bachelot, la exministra francesa de Sanidad y Deportes que le acusó sin pruebas de haber escondido un positivo por dopaje. “Sabemos que la famosa lesión de siete meses de Nadal es sin duda debido a un positivo”, dijo Bachelot en la televisión francesa el pasado mes de marzo, señalando al paréntesis que el mallorquín necesitó para recuperarse de una hoffitis en la rodilla izquierda y una rotura parcial del ligamento rotuliano. La reacción ha llegado por la vía legal: el español ha presentado una querella por difamación en los Tribunales de París.
“Por la presente me gustaría hacer público que tras las declaraciones de la Sra. Roselyne Bachelot emitidas en el programa Le Grand 8 del canal de televisión francés D8 el pasado mes de marzo, he interpuesto en el día de hoy, 25 de abril de 2016 en los Tribunales de la ciudad de París (Francia) una querella por difamación contra la Sra. Roselyne Bachelot”, anunció el mallorquín en un comunicado enviado por su jefe de prensa.
“El letrado responsable de la dirección jurídica de la misma es Patrick Maisonneuve. Con esta actuación pretendo no solo defender mi integridad e imagen como deportista, sino también los valores que he defendido a lo largo de mi carrera”, continuó. “También deseo evitar conductas en cuanto a que cualquier persona pública pueda lanzar acusaciones injuriosas en un medio de comunicación contra un deportista, sin fundamentos ni datos que puedan demostrarlo, quedando impune”, prosiguió el campeón de 14 grandes, acostumbrado a escuchar acusaciones similares durante su carrera.
Donaciones en caso de indemnización
“En caso de que el Juez que instruya la causa considere que ha existido un perjuicio y en la sentencia se reconozca la indemnización de daños y perjuicios solicitada, el importe íntegro de la misma la donaré a una ONG o Fundación en Francia”, dijo Nadal.
“Por otra parte solicito el máximo respeto al procedimiento judicial iniciado, queriendo dejar constancia de mi máxima confianza en la Justicia francesa que ha de resolver sobre el asunto. Agradezco de manera personal a todos los medios de comunicación el trato que siempre han tenido conmigo como persona y como deportista durante toda mi carrera”.
Así, Nadal cumple con lo que prometió después de ser acusado por Bachelot: nunca más se volverá a quedar de brazos cruzados.