El consejo de la Federación Internacional de Tenis (ITF) ha vivido una jornada histórica cuando sus miembros se han sentado a votar si aprueban la transformación de la Copa Davis, para lo que se necesitaba una mayoría de dos tercios que ha conseguido.
El pasado 26 de febrero, la ITF anunció un plan de asociación a 25 años por casi 2.500 millones de euros con el grupo inversor Kosmos, fundado y presidido por el futbolista Gerard Piqué. El fin es celebrar desde 2019 la Copa Mundial de Tenis, que disputarán 18 naciones en una sede única el mes de noviembre de cada temporada. Esto sustituye a la actual Copa Davis que necesitaba un cambio de formato debido a las ausencias de jugadores carismáticos.
Tras la publicación del importante acuerdo entre la ITF y Kosmos, estas son las claves de la nueva Copa Mundial, que ha enterrado a la Copa Davis para siempre y, a su vez, abre una nueva era en el circuito del tenis mundial.
Los jugadores, felices
Han sido muchos años de peticiones por parte de los jugadores, que solicitaban una reforma de la anticuada Copa Davis. Un torneo que dejó de atraer a las grandes raquetas del circuito durante mucho tiempo y que veía como entraba en barrena en una época de crisis y decadencia.
La reforma impulsada por Gerard Piqué cumplirá los deseos de los tenistas y abre la puerta para que las estrellas del circuito puedan competir este ambicioso torneo. Los mejores competirán por sus colores y con la mítica Ensaladera como recompensa, como hasta ahora, pero con varias diferencias más que significativas.
Siete días de competición
La nueva Copa Mundial de Gerard Piqué rompe con la estructura que la anquilosada Copa Davis no ha variado a lo largo de su historia. El Grupo Mundial lo componen 16 países y, hasta este momento, debían superar tres series para acceder a la final. Pero el plan de Piqué es mucho más ambicioso.
Desaparecen las eliminatorias para que concentrar el torneo en una misma ciudad durante tan solo una semana del mes de noviembre. Siete días en los que las 18 naciones pelearán en una fase de grupos a la que seguirá dos eliminatorias que te darán el acceso hasta la final de la Copa Mundial de tenis.
Se acabaron los partidos en casa
La idea de reunir a los mejores jugadores de 18 países en la misma ciudad (aún por decidir, aunque presumiblemente será en Asia) para competir durante siete días por la Ensaladera es el impulso que necesitaba la Davis para no morir, pero inevitablemente la decisión de revivir a la competición aplicando cambios drásticos deja víctimas en el arcén.
La Copa Mundial acaba, de este modo, con las eliminatorias en casa, y eso quiere decir que los aficionados ya no podrán ver a los jugadores en sus pistas. Tan solo lo harán aquellos que se desplacen hasta la sede que se fijará a la que, por cierto, oposita Madrid para la primera edición.
No habrá cinco sets
El nuevo formato enterrará para siempre los encuentros a cinco mangas, otra de las señas distintivas de la Davis. Todos los partidos de la Copa Mundial (dos individuales y un dobles por cada eliminatoria) se jugarán al mejor de tres sets, recortando considerablemente el desgaste de los tenistas y dejando a los cuatro torneos del Grand Slam como los únicos con duelos al mejor de cinco parciales.
Superficie fija
Hasta ahora, el equipo que actuaba como local en una eliminatoria de Davis tenía la potestad de elegir la superficie y el tipo de pelota a utilizar durante la serie. La nueva Copa Mundial terminará con esa diversidad de superficies porque el torneo se celebrará en el mismo suelo para todos los participantes, anulando la ventaja de escoger las condiciones de juego.
Ganan las televisiones
La Copa Mundial debería ser un atractivo caramelo para que las televisiones pugnen con fuerza por los derechos de emisión. A diferencia de la Davis, que ofrecía una eliminatoria de tres días de duración (viernes, sábado y domingo) marcada muchas veces por las ausencias de los mejores tenistas de la clasificación, la revolución del formato deja una jugosa oferta para que cualquier televisión del mundo esté interesada en ofrecer el torneo.
Daños colaterales
Los capitanes de los equipos pierden todo el protagonismo que tenían a lo largo de la temporada. La fecha de la Copa Mundial (noviembre) hace que carezca de sentido continuar con el habitual seguimiento de los jugadores que los seleccionadores solían realizar en los torneos previos a las eliminatorias, como el Abierto de Australia o Miami. A partir de 2019, el trabajo de los capitanes se concentrará en las últimas semanas de cada curso, en las que deberán reclutar a los tenistas de cada equipo.
Noticias relacionadas
- Luz verde a la nueva Copa Davis de Piqué
- "No vas a ganar la Champions con 25 goles de Ramos"
- Lucas Hernández se desata tras la Supercopa: así fue la fiesta del francés
- Las redes se mofan de Futre y su exaltada celebración de la Supercopa
- Análisis de La Liga: la lucha por la permanencia ante el temor del descenso
- El Real Madrid pierde una final internacional 18 años y 13 títulos después