Nick Kyrgios es uno de los casos más sorprendentes dentro del mundo del tenis. Su talento es innegable, pero su cabeza y, sobre su todo su boca, le pierde. Si solo se centrase en la pista sin duda sería uno de los mejores del mundo.

En el torneo de Acapulco, el australiano eliminó a Nadal en cuartos de final tras un partido en el que el tenista español se quejó de la actitud de su rival. En muchas ocasiones se vio a Kyrgios quejándose de lesiones o incluso sacando de cuchara.

Al termino del encuentro, Nadal habló sobre la actuación de su rival: "Lo que le falta (a Kyrgios) es un poquito de respeto para el público y para el rival y hacia sí mismo también. Creo que debe mejorarlo". Ante este mensaje el número 72 del ranking ATP no tardó en responder:  "Soy diferente, Rafa es diferente. Podría centrarse en lo que tiene que hacer. No sabe por las lesiones que he pasado, no sabe nada sobre mí, así que no voy a escucharle".

Cuando parecía que la tensión entre ambos había llegado a su fin, Kyrgios volvió a la carga con un polémico post en Instagram: "No dudes de ti mismo, hay un montón de gente que lo hará por ti. Yo puedo oler la sangre cuando juego contra este tipo". Acompañando el mensaje había emoticonos de un fantasma, un robot y una jeringuilla.

En semifinales volvió a liarla

Tras la victoria ante Nadal, el tenista australiano increpó al público del estadio abriendo sus orejas en clara señal de que en ese momento no escuchaba los pitos que le habían dedicado durante el encuentro.

Pero en el partido de semifinales ante Wawrinka la cosa fue a más y es que, a pesar de la victoria que clasificó al australiano para la final, en un momento del encuentro Kyrgios se dirigió a un aficionado al que llamó "idiota".

[Más información: Nadal se enreda en el show de Kyrgios]

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