Cerca de la una de la madrugada, una flota de coches esperaba a los ganadores de la Copa Davis para salir de la Caja Mágica y poner rumbo a la celebración de la sexta Ensaladera de la historia de España, ganada con sangre, sudor y lágrimas en una semana llena de obstáculos. Tras cancelar una recepción prevista el lunes por la mañana en el Palacio de la Moncloa, los tenistas disfrutaron tranquilamente de una merecida noche de fiesta antes de ponerse a pensar en el futuro inmediato, que es distinto para casi todos.
Rafael Nadal, por ejemplo, no se irá de vacaciones porque su pretemporada comienza pronto (el 19 de diciembre disputa el clásico torneo de exhibición de Abu Dhabi, que esta temporada adelanta sus fechas) y su gran objetivo es llegar preparado al Abierto de Australia (desde el próximo 20 de enero), donde se juega igualar el récord de grandes de Roger Federer (19 a 20 ahora mismo). El mallorquín, que acaba el año con 65 partidos en las piernas, no terminaba tan tarde un curso (24 de noviembre) desde hacía mucho, por lo que la gestión de las próximas semanas, el balance entre el descanso y el trabajo, será fundamental para afrontar el 2020.
Bautista se casará
Roberto Bautista pasará por el altar para casarse con Ana Bodí el próximo 30 de noviembre, y tras una breve luna de miel se pondrá manos a la obra pensando en un año que abrirá con Nadal en la edición inaugural de la ATP Cup (del 3 al 12 de enero), y que será un gran desafío de principio a fin si quiere mantener su posición actual en la clasificación (número nueve mundial) para aspirar a crecer todavía más.
Roberto Bautista levanta la Copa Davis rodeado del equipo español
A Pablo Carreño le espera una visita a Barcelona para hacerse pruebas e intentar arreglar la sobrecarga en la pierna izquierda que sufrió en el primer partido de la eliminatoria de cuartos de final contra Guido Pella, confiando en que no sea nada lo suficientemente grave como para condicionar sus entrenamientos de los próximos días, fundamentales para que el gijonés acabe de culminar el siguiente curso una recuperación que inició hace unos meses ganando el título en Chengdu para cerrar 2019 metido otra vez entre los 30 mejores de la clasificación.
Feliciano, ¿en su último año?
Feliciano López tiene un plan reservado desde hace meses para estas fechas: irse a disfrutar con su mujer Sandra Gago de un viaje de novios que no pudieron hacer en septiembre cuando se casaron en Marbella. El toledano, que estrena técnico en 2020 (Marc López, con el que también disputará el dobles), cumplirá 39 años la próxima temporada, que quizás sea la última de su carrera profesional. Como Nadal, Bautista y Carreño, López arrancará su calendario en la ATP Cup, antes de llegar en Melbourne a los 73 grandes disputados de manera consecutiva.
Marcel Granollers, por su parte, parará unos días y luego empezará un plan específico que le permita regresar al top-100 en individuales (112 ahora mismo) y mantener el buen tono en el dobles (termina el año entre los 25 mejores), aprovechando como el resto el impulso ganador de una Davis que dejará huella con toda seguridad en los cinco tenistas que guiaron a España hacia el título.
[Más información: La historia de España en la Copa Davis: las seis Ensaladeras en 19 años]