Las últimas 24 horas han sido una pesadilla para Novak Djokovic. El número uno del mundo se las prometía felices cuando este miércoles puso rumbo desde Dubái hasta Australia, pero todo se torció antes de que aterrizara. Las autoridades revocaron el visado del serbio para entrar al país con una exención médica para competir en el Abierto de Australia sin vacunarse y ahora este se encuentra retenido en el país.
Los abogados de Djokovic han recurrido ante la justicia australiana la revocación del visado del tenista y este espera en el Park Hotel de Melbourne, al que fue trasladado desde el aeropuerto. Se trata de un hotel al que califican de "infame" tras haber servido durante más de un año como lugar de hospedaje para detenidos procedentes de las islas de Manus y Nauru. Aún más de una treintena de ellos permanecen en las instalaciones.
Djokovic fue trasladado al hotel con pistas de tenis a petición de sus abogados, que también exigieron que la demanda se resuelva antes del inicio del Abierto de Australia, que se celebrará entre el 17 y el 30 de enero en la ciudad de Melbourne. La audiencia para decidir su deportación o la aceptación del visado se ha pospuesto hasta el lunes 10.
Nole pasó más de ocho horas retenido por las autoridades fronterizas ante las que prestó declaración por no cumplir con los requisitos impuestos por la Covid.
Un contratiempo administrativo fue el origen de los problemas de Djokovic, pero estos se vieron agravados por la exigencia de las autoridades del gobierno del país oceánico de una justifiación para que le fuera concedida la exención. La causa que habría presentado el serbio sería haber pasado el coronavirus en los últimos meses, razón que no figura en principio en el listado de causas para acceder a Australia sin la vacuna.
La Fuerza Fronteriza Australiana confirmó en un comunicado la revocación del visado a Djokovic, conocido por oponerse a la inmunización obligatoria contra la Covid, argumentando que "los no ciudadanos que no tengan un visado válido a la entrada o a los que se les haya cancelado el visado serán detenidos y expulsados de Australia".
"No hay casos especiales. Las reglas son las reglas", dijo el primer ministro australiano, Scott Morrison, al explicar en una rueda de prensa en Camberra que los viajeros que entran a Australia requieren tener la pauta completa de la vacuna contra la Covid-19 o una exención médica.
Las autoridades australianas llegaron a informar al número uno de que debía abandonar el país con efecto inmediato, pero la apelación ante la justicia australiana para evitar la deportación mantienen paralizada la situación y al tenista 'encerrado' en un hotel que en 2020 fue también usado como hotel de cuarentena.
Nada más aterrizar en tierras australianas, Djokovic fue separado del grupo con el que viajaba (su entrenador Goran Ivanisevic, incluido) en el control de pasaportes y conducido a una sala del aeropuerto Tullamarine (Melbourne). Custodiado por dos policías, el ganador de 20 Grand Slams fue despojado de su móvil, el cual no le fue devuelto hasta pasadas más de tres horas, y fue interrogado durante la noche.
Cuestión de estado
Mientras tanto, el asunto se ha convertido casi en una cuestión de estado en la que han intervenido las principales autoridades políticas de Serbia y Australia. El presidente serbio, Aleksander Vučić, se pronunció con contundencia en las redes sociales: "Acabo de colgar con Novak Djokovic. Le dije que toda Serbia está con él y que nuestras autoridades están tomando todas las medidas para detener el acoso al mejor tenista del mundo en el menor periodo posible. De acuerdo con todas las normas del derecho público internacional, Serbia luchará por Novak Djokovic, por la justicia y la verdad".
Scott Morrison, primer ministro australiano, replicó en su antes mencionada rueda de prensa: "Australia tiene reglas claras sobre sus fronteras soberanas que no son discriminatorias. La revocatoria responde a la aplicación razonable de las leyes de protección de las fronteras de Australia".
La tensión sube y así lo quiso hacer saber el padre de Novak, Srdjan Djokovic, que pidió el apoyo de sus compatriotas desde un medio serbio: "Si no lo liberan en la próxima media hora lucharemos por su libertad en la calle". Reina la incertidumbre sobre la mejor raqueta del mundo, que cada vez parece más lejos de poder participar en el Abierto de Australia, el primer Grand Slam de la temporada.
[Más información: La exención a Djokovic acumula enemigos: la vacuna obligatoria gana adeptos dentro de la ATP]