El 'caso Djokovic' altera la lucha del deporte contra la Covid: vacuna obligatoria o controles constantes

Novak Djokovic fue expulsado del Open de Australia por no estar vacunado. Después de varios días de tensión, el gobierno australiano decidió deportar al número uno del mundo. Una decisión controvertida, acompañada de polémica y que ha generado un debate mundial sobre las normativas contra la Covid que debe tener cada organización. Por el momento, ya se han observado dos estrategias entre las competiciones: desde la de obligar a vacunarse hasta el aumento de controles para fomentar la inoculación.

El Open de Australia se ha erigido como la gran referencia respecto a la vacunación obligatoria. El gobierno ya había advertido de que este iba a ser un requisito fundamental para poder competir en el primer Grand Slam del año. Sin embargo, tras aceptar la exención médica de Djokovic parecieron dar un paso atrás. Finalmente se ha mantenido la postura inicial y sin vacuna no ha habido participación.

De igual manera, otros torneos han respaldado la decisión de Australia. De los primeros en apoyar la vacunación obligatoria para competir fue el torneo de Estoril, de mucho menor impacto pero con la misma premisa: tener la pauta completa contra la Covid para poder pisar su pista. "No, en absoluto", respondieron desde la organización lusa cuando les preguntaron sobre la participación de Nole.

Novak Djokovic, en Australia EFE

Esta misma semana ha sido cuando se ha confirmado que otro Grand Slam como Roland Garros obligará a todos sus participantes a tener su pasaporte Covid. Una vacunación obligatoria encubierta que, si nada cambia, impedirá a Djokovic participar en la tierra batida francesa. A pesar de que en un primer momento se defendió que el serbio sí iba a poder jugar, el cambio de normativa ha acabado con sus opciones.

La polémica ha llegado hasta al Mutua Madrid Open y a España, donde diferentes autoridades se han pronunciado. La última y más relevante ha sido la de Pedro Sánchez, quien ha destacado la diferencia de normativa entre países. Según el presidente del Gobierno, Djokovic debe "cumplir las normas" como el resto, pero la normativa le permitiría participar con una PCR negativa.

El tenis, por lo tanto, está siendo el escenario donde más se está aplicando la vacunación obligatoria debido a la normativa de los propios Estados. Sin embargo, en el otro lado de la estrategia se encuentran competiciones de gran relevancia como la NBA o la NFL. En ninguna de ellas, por la normativa estadounidese, es obligatoria la vacunación. Sin embargo, se han establecido protocolos para fomentar esta.

La negociación de la NFL

La NFL es el claro ejemplo de cómo buscar el objetivo del 100% de vacunación. La liga de fútbol americano anunció hace unas semanas que casi el 95% de los jugadores estaban vacunados y prácticamente el 100% de los trabajadores seguía la misma situación. Por ello, desde la propia liga se ha defendido un trabajo conjunto con la NFLPA (sindicato de jugadores) para alcanzar la totalidad de vacunados. Una negociación que se aleja y mucho de la imposición.

La ventaja con la que se trata de convencer de recibir las dosis pertinentes no es otra que la de disfrutar de un protocolo más relajado. Mientras que los no vacunados deben someterse a pruebas contra la Covid de manera diaria, las personas vacunadas apenas tienen que pasar por dicho proceso una vez a la semana más allá del resto de veces que acudan de manera voluntaria.

Antonio Brown, en un partido de los Tampa Bay Buccaneers Reuters

Un proceso similar al que se vive en la NBA, donde el acuerdo con el sindicato de jugadores es imposible por los postulados de estrellas como Kyrie Irving entre otros. En la mejor liga de baloncesto del mundo, tras el cambio en la normativa sanitaria de Estados Unidos, los vacunados podrán reducir su cuarentena de 10 a seis días o incluso podrán romper el aislamiento siempre que presenten dos pruebas PCR negativas y seguidas en dos días diferentes.

Por lo tanto, ambas competiciones han optado por aumentar el porcentaje de vacunados entre sus participantes mediante protocolos más laxos para aquellos que han recibido la pauta completa. Justo una postura opuesta a la que han tomado en los diferentes torneos de tenis guiados por las normas estatales.

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