¿Qué esperar de Rafa Nadal en su regreso al tenis en Brisbane?: objetivo ser competitivo

Desde que aquel fatídico 18 de enero jugara contra Mackenzie McDonald en el encuentro de segunda ronda del Abierto de Australia, el de Manacor no sabe lo que es competir. En aquel momento puso en pausa su dilatada carrera, decidió mirar por su cuerpo y tuvo que parar porque su físico le había dicho "basta".

Aquello fue un shock para todo el mundo, un bofetón de realidad tras años de un organismo llevado al límite, así que la paciencia pasó a ser la mejor aliada. Y ahora, después de tanto tiempo a la espera, de muchas horas de trabajo a la sombra, por fin Rafa Nadal va a poder recoger los frutos y va a sentirse tenista profesional de nuevo a sus 37 años.

Rafa Nadal, en su llegada a Brisbane

El ATP 250 de Brisbane centra más focos que nunca. Este torneo que sirve para abrir la temporada oficial y que ocupa un cuarto peldaño en la escalera de divisiones de las competiciones, de repente ha cobrado una relevancia similar a la de un Grand Slam por la mera presencia de Nadal. 

El resultado que consiga el español en esta competición es prácticamente lo de menos. Desde luego que verle de nuevo vestido de corto golpeando la bola con su raqueta será lo mejor, así que a partir de ahí todo lo que tenga que llegar en forma de números será bien recibido.

El objetivo, competir

"No digo que nada sea imposible, pero sólo estar aquí ya es una victoria". Esta frase de Rafa Nadal ya dice mucho de lo que se puede esperar de él en el torneo de Brisbane, o más concretamente de lo que él espera lograr. 

Rafa acude sin presión. Sabe que centrará las miradas de miles de ojos y que todos los focos estarán puestos sobre él, pero no se marca un resultado estrictamente deportivo. El hecho de llevar tanto tiempo fuera de la pista le puede pesar a la hora de volver a competir, y actualmente nadie regala ni una sola victoria en el circuito.

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"Va a ser un proceso duro al principio. Al final, es un año sin estar en la pista de tenis y sólo he estado practicando durante el último mes a una muy buena intensidad", aseveró el del Manacor sobre cómo cree que puede llegar a sentirse en el momento de regresar a la pista. 

Nadal se encontrará a rivales mucho más rodados que él en competición, aunque eso no quiere decir que mejor preparados físicamente porque Rafa se cuida al máximo. De hecho, en lo que nadie va a ganar al español va a ser en motivación, porque en el momento en el que 'redebute' tendrá la mayor ilusión de los últimos tiempos, como si estuviera jugando la final más importante de su carrera.

El manacorí lo tiene muy claro: "Es imposible pensar en ganar torneos". Es un claro aviso a navegantes, para que nadie se piense que por regresar a la competición está preparado para hacer frente a varios partidos consecutivos de la máxima exigencia. Es una forma de quitar presión y de poner las cartas sobre la mesa.

Rafael Nadal, durante su pretemporada en Kuwait

Por eso, ahora lo que Rafa quiere es competir, sentirse de nuevo un jugador de tenis que pueda aspirar a ganar partidos, aunque no mire más allá. La meta está en el corto plazo, y si se gana un partido, irá a por el siguiente pero nunca levantando en exceso la vista. 

"Sinceramente, lo único que espero es salir a la cancha, sentirme competitivo y dar lo mejor de mí", una frase suya unas pocas horas antes del arranque del torneo que resumen perfectamente los planes de Nadal. Enfrente, tendrá a rivales de la talla de Rune, Andy Murray o Grigor Dimitrov.

La locura por Rafa

La presencia de Rafa Nadal en Brisbane se ha convertido en todo un acontecimiento social. Habrá caído hasta el número 672 en el ranking de la ATP, pero desde luego en la lista del cariño que le brinda el público sigue estando en la cúspide. 

La organización del torneo realizó un acto público en la previa, y la afición se volcó con él. En un pequeño escenario montado para la ocasión, Nadal fue presentado ante una muchedumbre que aguardaba con ansia su presencia. En el momento de subir al escenario, la gente enloqueció y demostró que sigue guardando un gran aprecio por una figura que ha hecho tanto por el tenis.

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Nadal regresará a la competición en Australia, pero el calor del público en cada partido que juegue (si es que hay más de uno) le va a hacer sentir como en casa. El de Manacor es el favorito de la afición en el torneo y eso puede servir también de impulso para el propio tenista. 

"En los momentos en los que las cosas no van bien, por supuesto que el apoyo de la gente ayuda a seguir adelante. Me siento muy afortunado de haber recibido un gran apoyo en todas las partes y Australia siempre ha sido un lugar muy especial para mí", dijo Rafa. Una muestra de que se sigue sintiendo admirado en todos los confines del planeta.