La cantante Diana Navarro.
Inaugura este viernes los Veranos de la Villa con un espectáculo de flamenco puro.
Pregunta.- ¿Cómo es eso de abrir Los veranos de la Villa en un lugar tan emblemático como los jardines de Sabatini?
Respuesta.- Me hace muchísima ilusión, es un sitio por el que he pasado muchas veces y me apetecía mucho cantar allí. Aunque soy malagueña, tengo el corazón partío, porque llevo años yendo y viniendo y me siento muy de Madrid, de adopción por lo menos.
P.- Se distancia de los ritmos y fusiones que le hicieron famosa y se da al flamenco puro en este espectáculo. ¿Asusta el cambio?
R.- Escucho flamenco desde que tengo uso de razón y el flamenco estaba en No te olvides de mí, la canción que me dio fama. Para mí siempre ha sido el referente. Tenía una necesidad de encontrarme con el cante clásico, en el que me inspiré para encontrar mi propio estilo. Me refiero a gente como La Niña de la Puebla, Valderrama, Pepe Pinto... con ellos me quedé loca, es increíble que tuvieran esa facultad con tan pocos medios.
P.- El repertorio se convertirá en un disco que saldrá en noviembre. ¿Será también un trabajo de jondo puro y duro o dará cabida a otras músicas?
R.- La fusión sólo estará presente en algún giro de la voz, pero queríamos que fuera sólo flamenco, de ahí que se titule precisamente Diana Navarro. Flamenco, para que no haya confusión. No es un trabajo para vender muchos discos, sino para contentar a la gente que nos quiere y a la que le gusta este cante clásico que ahora es Patrimonio de la Humanidad.
P.- No es la primera cantante de fusión entre música española y otras músicas como el pop que decide volver a las raíces. ¿Es una moda?
R.- Para ser original, hay que irse al origen. Cada uno tiene su momento y a mí me ha llegado ahora, es una necesidad de poner los pies en la tierra madre y desde ahí seguir evolucionando. Es un cante tan rico y tan grande que me impone mucho respeto, por eso me lo he preparado mucho. Pero es flamenco pasado por mi filtro y estoy contentísima. Siempre he sido muy osada, como me gusta tanto cantar, todo lo intento.
P.- Cuando habla de su "filtro" supongo que se refiere a la peculiaridad de sus cuerdas vocales. La suya ha sido definida como una voz manierista, barroquizante. ¿Sería usted capaz de poner palabras a su don?
R.- Adoro cantar, la voz es una capacidad maravillosa que me ha regalado la vida, y poder hacerla sonar es felicidad, por eso la definiría como una voz que denota que soy feliz cantando.
P.- ¿Y hacia dónde proyectará esa voz en el futuro?
R.- Tenemos otro proyecto avanzado de zarzuela para el mes de abril y luego volveré a preparar temas nuevos de fusión.
P.- Para cerrar, ¿querría citar algún tema del espectáculo y futuro disco flamenco que le toque especialmente?
R.- Hay una milonga que cantaba La Niña de la Puebla que habla de lo que ella siente desde su ceguera y que dice "el sol me niega su luz, la luna sus resplandores, por el aroma conozco la existencia de las flores". En general son todas letras de amor, de desgarro... y, entre ellas, hay un homenaje al maestro Morente, al que conocí y admiré, y que dice: "Ni contigo ni sin ti mis males no tienen remedio". El flamenco es pura poesía y, además, popular, para todos los públicos.