David Delfín (Ronda, Málaga, 1970) no es solo diseñador de moda sino artista en general. A pesar de ser más conocido por sus desfiles, a veces tan polémicos como populares, le gusta escribir y crear. Tras haber pasado por la Pasarela Cibeles y la Madrid Fashion Week, David Delfín vuelve ahora a la Fresh Gallery de Madrid con una exposición de dibujos e ilustraciones hechos con la mano izquierda. Aunque es uno de los diseñadores españoles más internacionales, sigue combinando zapatos negros con calcetines blancos al más puro estilo Michael Jackson. Marca de la casa. Pregunta.- Expone en la Fresh Gallery su colección de dibujos e ilustraciones bajo el nombre Interiores. ¿De dónde surge la idea de estos dibujos? Respuesta.- Llevo haciéndolos muchísimos años, desde que llegué a Madrid en el año 1989. Están dibujados con la mano izquierda y así surge esta caligrafía que se ha convertido en la imagen y seña de identidad de nuestro proyecto. De alguna forma lo tenía abandonado y a partir de Instagram empecé a utilizar los dibujos para felicitar el cumpleaños a mi gente cercana. Casi todos están en formato cuadrado, precisamente porque era para Instagram. Topacio Fresh los vio y me dijo que teníamos que hacer la exposición. P.- ¿Cuál es la intención de esta muestra? ¿A qué público se dirige? R.- La exposición se llama Interiores. Hay referencias de cine, música y todas las cosas que me tocan a mí. Supongo que me dirijo a un público al que le gusten mis dibujos y mi moda. No lo sé. P.- ¿Qué vínculo hay entre estas ilustraciones y su trabajo como diseñador? R.- Es otra forma de mostrar mis inquietudes y las elecciones que hago. Hay textos propios, me encanta escribir. En moda no puedo hacerlo, solo cuando mandamos notas de prensa, pero aquí hay una especie de poemas que se completan con otros que no son míos. Hay un texto de Oscar Wilde que, además, llevo tatuado. Frases de Jean Moreau y temas muy pop como Janet Jackson con quien despedí mi último desfile. O de las Nancys Rubias. También hay algunos que he escrito con Bimba y que luego han utilizado para The Cabriolets. Y luego, hay referencias mucho más cercanas al arte como a Steinberg o Warhol incluso a Las Veneno. P.- Muchas veces el arte y las galerías son bastante elitistas. En este caso, su muestra es algo atípica. ¿Cree que el arte debería abrirse y expandirse en diferentes direcciones para no ser tan excluyente? R.- Creo que el arte está abierto a todo el mundo. El arte se vive con la mirada, otra cosa es que no todos podemos comprarlo. Yo lo disfruto en las exposiciones. Pero las que se hacen en la calle no me gustan, Soledad Lorenzo me enseñó que las galerías condicionan la mirada, si lo sacas de allí se pierde el sentido de la obra. Si encontramos una obra del siglo XX en la basura no la cogeríamos para ponerla en casa pero si la vemos en una galería adquiere el sentido que tiene. P.- Usted que es coleccionista, ¿qué es lo que busca a la hora de coleccionar? R.- Tengo pocas cosas pero me doy cuenta de que era algo inconsciente, me fijaba en algo y lo compraba. Al tiempo descubrí que había un denominador común en todo lo que adquiero y es que había ausencia de la mirada, no hay miradas y ese es el punto de coherencia de mis colecciones. El arte funciona también como el amor, de alguna forma, el arte es emocional, intuitivo. Hay cosas que veo, me gustan y me llegan, me da igual que me digan que algo es 'lo más' si para mí pasa desapercibido. Es muy pasional, te enamoras de una obra. P.- Bimba Bosé es una de las personas a quien dedica una de las ilustraciones con un poema. ¿Ha trabajado con ella para estas ilustraciones? R.- No, hemos hecho justo ese texto juntos. Somos amigos, nos damos ideas, ella escribe, yo lo reescribo y se lo devuelvo. Juntos vamos haciendo cosas, incluso canciones para su grupo. P.- Siempre ha sido muy arriesgado, a veces polémico. ¿Es mejor ser polémico que pasar medianamente desapercibido? R.- La provocación por provocación no me interesa, quiero causar emociones. No me siento identificado con eso de ser polémico pero a lo mejor es porque no me doy cuenta. Quiero provocar emociones. En esta muestra hay algo de lo que me doy cuenta y es que algunos textos son ‘fuertes', el trazo infantil con el texto y vocabulario, por ejemplo, de La Veneno impacta. O la frase “cada hombre mata lo que ama”, choca. Llegados a un punto la provocación me parece interesante porque es antídoto para la depresión y el aburrimiento. P.- Siempre se ha hablado sobre si la moda es cultura o no. Para usted, ¿lo es? R.- La moda es cultura, no todo es arte pero igual que no toda la pintura es arte. Hay muchos artistas que utilizan el soporte de la moda y hay algunos diseñadores que considero artistas. La producción también existe en el arte y la funcionalidad es imprescindible. A lo mejor necesitamos tiempo para asimilar que la moda es cultura. Como pasó con la fotografía, ahora se considera arte pero hace años era algo más documental, es reciente. P.- ¿En tiempos de crisis la moda de diseñador debería adaptarse a la economía con diseños de menor precio? R.- Creo que debe de haber de todo. Yo intento ajustarme al máximo pero no puedo conseguir lo que consiguen otras empresas que tienen producciones mayores, que compran la misma tela al por mayor y les sale más barato. Las cosas tienen que tener su precio. P.- Para terminar, ¿cómo se adapta la moda española en el mundo? R.- Nosotros estamos muy contentos, siempre hemos apostado por la tecnología, fuimos los primeros en tener tienda online, nos adaptamos a las redes sociales y nos va bien. Estamos ampliando los puntos de venta, tenemos una tienda en Dubai. Estamos creciendo, en el año 2012 duplicamos las ventas respecto a 2011 y este año ya hemos superado el total del año pasado. Las ventas internacionales van en aumento, estamos en Europa, en Singapur, etc. Es fantástico. Cada vez tenemos mas aceptación.