Con pinceladas sutiles Nico Munuera (Lorca, 1974) ocupa toda la superficie del lienzo. El artista utiliza diferentes soportes para sus creaciones como la fotografía y el dibujo aunque en la doble exposición que inaugura en las galerías Max Estrella y La Caja Negra las telas y el papel oriental son los protagonistas. En la primera diez lienzos llenos de color transmiten la sensación de la estampa japonesa, en la segunda, papeles orientales donde lo pictórico sucede como si el gesto acabara de ocurrir. Dos muestras diferentes que permiten extender sus propuestas y mostrar diferentes aspectos de su trabajo. Los espacios son distintos de modo que "es un condicionante que influye directamente en la relación con lo que ves", comenta. Pregunta.- En Inside Color en la galería La Caja Negra utiliza papeles orientales para sus creaciones. ¿Qué aporta este material a su proceso creativo? Respuesta.- Utilizo todo tipo de soportes continuamente, pero sí que es cierto que mi preferencia hacia estos papeles orientales viene dada por su gran calidad de registro y resistencia. Aunque no lo parezca los castigo mucho en el proceso. P.- Su manera de crear es muy cercana al pensamiento oriental. ¿Cómo comienza a hacer una nueva pieza y de dónde surge la inspiración? R.- Me gusta decir que comienzo con una excusa o encuentro, un color, un soporte, una palabra, una imagen, un sonido, con la intuición y la incertidumbre; con todo esto se empieza. Es un estado de acción y concentración en el cual vas arrastrando todo lo hecho anteriormente. Ya nunca puedes empezar de cero. El proceso es parte fundamental de la creación de las ideas y conceptos. La intuición, que viene supuestamente del inconsciente, es el motor pero hay que alimentarla en la medida de lo posible desde el consciente. P.- Expone también La isla de Boneless en la galería Max Estrella. ¿Cuál es su peculiaridad? R.- Por un lado está el término boneless cuya traducción al castellano sería algo así como sin hueso o sin espinas y hace referencia a una técnica pictórica característica en la escuela japonesa de Rimpa. Consiste en no acotar las masas de color mediante un contorno de línea que lo perfile o sujete. A partir de este concepto me he adentrado en una pintura de carácter más atmosférico donde la utilización del color tienen connotaciones de la estampa japonesa.

Imagen de la exposición La isla de Boneless en la galería Max Estrella

P.- La geografía también tiene un papel en sus creaciones. R.- Es una propuesta donde la pintura se comporta con ligereza y a veces aparente arbitrariedad al igual que lo hacen las formas naturales, el crecimiento de una planta, la disposición de los elementos en la línea de costa etc. Por eso también está la idea de isla como espacio geográfico, lugar que habito, donde la experiencia de la naturaleza es intensa y me permite observar esos límites que continuamente se unen, se separan, se funden y confunden como un dibujo siempre cambiante. A fin de cuentas un cuadro es un mapa que se representa a sí mismo y transcribe a la perfección lo sucedido en ese lugar. P.- Fluidez y pincelada única. ¿Qué le sugieren estos dos conceptos en relación a su trabajo? R.- Son dos conceptos fundamentales, que me han servido como encuentro y una mayor apertura hacia vías formales y de pensamiento orientales. La ligereza, la aparente sencillez, el manejo del pincel, las propiedades de la tinta y el manejo del color desnudo siguen siendo fundamentos de la obra. P.- ¿Cuál ha sido la evolución de su pintura desde que empezó? R.- Ha venido ligada a la evolución como persona. Los intereses y fuentes de las que he ido nutriéndome, unido a una mayor intensidad en el trabajo han provocado diversas derivas. Es un proceso largo en el que siempre considero estoy empezando. Así veo mi evolución como un continuo comienzo. P.- ¿Cree que es difícil para los artistas de su generación conseguir el éxito a largo plazo? ¿Cómo puede mantenerse en el panorama? R.- El éxito es algo más abstracto que la propia pintura aunque todo el mundo parece saber de qué se trata. Cada cual tiene su propia visión de en qué consiste el éxito. Para mí sinceramente no es un tema al que haya que dedicarle ni un pensamiento. P.- ¿Podría su pintura calificarse como paisaje abstracto?, ¿qué es para Nico Munuera el paisaje? R.- Mi pintura no es paisaje abstracto sino pintura concreta. Entiendo el paisaje como una imagen construida en la memoria a partir de las experiencias en el espacio natural. Yo habito en el paisaje. La pintura me ha llevado a la observación minuciosa del entorno y no al contrario. Podría decir sin equivocarme que la práctica y la visión de la pintura potencia mi experiencia en el paisaje. La pintura es la naturaleza y pintar no consiste en representarla sino en ser. La pintura es un acontecimiento. @scamarzana