Ilustración: Ulises
Alicia Kopf, seudónimo que oculta a la artista Imma Avalos (Gerona, 1982), ha dinamitado convenciones y géneros con Hermano de hielo (Alpha Decay), una primera novela galardonada con los premios Llibreter, Documenta y Ojo Crítico.
Las correcciones, de Franzen, y Prisión perpetua, de Piglia.
¿Suele abandonar la lectura de libros? ¿Por qué razones?
Sí, por no conectar con él en ese momento o por no estar bien escrito.
¿Con qué personaje le gustaría tomarse un café mañana?
Con Karl Ove-Knausgaard.
¿Recuerda el primer libro que leyó?
Sí, era un libro de palabras sueltas con ilustraciones para niños de unos cuatro años. Intuía que la lecto-escriptura sería algo muy trascendente y viví esa introducción con ilusión y cierta inquietud. El primer autor que me gustó y del que tuve conciencia fue Gianni Rodari.
¿Cuáles son sus hábitos lectores? ¿Es de ipad, de papel, lee por la mañana, por la noche, varios a la vez?
Papel, aunque leo mucha prensa en el móvil, a mi pesar. Leo varios libros a la vez, de un tipo por la mañana (ensayo), y de otro por la noche (novela).
Cuéntenos alguna experiencia cultural que cambió su manera de ver la vida.
Muchas, empezando por la lectura, ir al cine o al teatro por primera vez. Todas, si son verdaderamente artísticas, te transforman un poco.
¿De qué artista le gustaría tener una obra en casa?
De muchos. De Àngels Ribé, Perejaume, Dora García (tengo un póster suyo que me acompaña en todas mis casas)...de la mayoría de amigos míos artistas y luego ya históricos y extranjeros como Bas Jan Ader, Francesca Woodman, Tacita Dean, John Baldessari, Lawrence Wiener, Sophie Calle, Francis Alÿs, entre otros.
¿En qué momento y por qué decidió combinar exploración, vida y viaje en el libro?
La exploración siempre es un viaje en dos direcciones, hacia fuera y hacia adentro. Ese es el sentido de un viaje y a la vez de la escritura como viaje interior y a la vez recorrido lineal hacia el final del libro.
¿Qué le debe Hermano de hielo a Fernández Mallo?
La noción de exho-novela a nivel estructural y de montaje, aunque en ese sentido también me influenciaron los Pasajes de Benjamin, así como su Calle de dirección única.
Hablando de hielo, ¿qué temperatura tiene nuestro mundo cultural? ¿Hiela de indiferencia, arde de aburrimiento?
En Cataluña el panorama es muy activo (no conozco tanto el resto), aunque un poco limitado a esferas: veo poca interdisciplinariedad en las distintas esferas del arte. A veces se peca de endogamia.
¿Le importa la crítica? ¿Le sirve para algo?
Me importa la crítica de los críticos a los que respeto. Sí, una crítica acertada puede señalarte ciertos aspectos de tu obra resueltos o supuestamente no resueltos. La verdad es que hasta ahora la crítica me ha tratado bien.
¿El éxito de su primera novela puede condicionar su futuro artístico?
De momento mis dos vertientes, visual y literaria, se están reforzando la una a la otra pues parten de la misma motivación y el mismo proyecto estético.
¿Es usted de las que recelan del cine español?
Para nada, todo depende del autor. Hay gente a quien admiro mucho haciendo cine arriesgado o desde los límites del género: Celia Rico, Mauro Herce, Lois Patiño, o Albert Serra, entre otros.
¿Le gusta España? Denos sus razones.
Los países son ideas muy abstractas para mí. Prefiero hablar de lugares. Me gustan muchos lugares de España, sí. Si se refiere a nivel político, no estoy orgullosa.
Una idea para mejorar la situación cultural de nuestro país.
Se reclama ya hace tiempo apoyo económico directo en la producción de obra y honorarios por las actividades realizadas (sean exposiciones o charlas). Que esos servicios se paguen puntualmente a 30 días como a cualquier otro servicio (sin aplazamientos burocráticos, condescendencias o actitudes de "favor" por parte del pagador). Sin artistas no hay contenidos. Y no necesitamos más "visibilidad" y "promoción": aquello que da soporte real son los honorarios.