Ilustración: Ulises
Ha sido pícaro, santo, héroe y místico. Los monólogos de Rafael Álvarez ‘El Brujo' (Lucena, 1950) han tocado con humor las cotas más altas de la literatura universal. Ahora está en Madrid con Autobiografía de un yogui.
Autobiografía de un yogui. La lectura de este texto es una iluminación para mí. Encuentro constante inspiración en sus palabras, está lleno de poesía, de grandeza...
¿Ha abandonado algún libro por imposible?
El Tratado de Derecho civil de 2°. Empecé la carrera de Derecho, pero llegado a este punto del tratado, comprendí que no era lo mío.
¿Con qué personaje le gustaría tomarse un café mañana?
Con Hamlet. Imaginen: traición, venganza, corrupción, la ira convertida en locura...
¿Recuerda el primer libro que leyó?
El Catón era el libro con el que los niños de mi época aprendíamos a leer. Por eso es el primero.
Cuéntenos alguna experiencia cultural que le cambió su manera de ver la vida.
La visita a la Acrópolis. Se alza en una cima sobre el mar. La visión es mágica, sentí que esas piedras me transmitían algo sobrenatural.
¿Cómo le gusta leer, cuáles son sus hábitos de lectura: es de iPad, de papel, lee por la mañana, por la noche...?
En papel siempre y a cualquier hora. Escribo en cualquier lugar y en cualquier tipo de papel, puedo escribir la adaptación de un texto que estoy preparando en una servilleta de una cafetería, en un folio de un hotel...
¿Puede combinarse el yoga con el humor?
Sí. El sentido del humor es un fundamento de la felicidad. El ser humano está hecho para la risa.
¿Cómo se tomaría un yogui todo lo que está ocurriendo en el mundo?
No se lo tomaría en serio. Los yoguis van y vienen. Ellos no consideran importantes los acontecimientos de la vida, saben que son pasajeros, que son irreales.
¿Cuál es su fórmula para mantener al público en la butaca con su sola presencia en el escenario?
E= mc2
¿Cuándo se dio cuenta de que el monólogo era lo suyo?
Con El Lazarillo de Tormes ya sentí la inmensa comodidad que me daba estar sólo en el escenario. A partir de ahí los dioses me favorecieron seguir por este camino.
¿Qué porcentaje tiene de pícaro y qué porcentaje tiene de santo?
Un 13, 3% de santo, 15% de pícaro y el resto de todo lo demás.
¿Qué le falta o qué le sobra al teatro español de hoy?
Le sobran experimentos con su propia autoestima.
¿Entiende, le emociona, el arte contemporáneo?
No lo entiendo, pero me gusta.
¿De qué artista le gustaría tener una obra en su casa?
Basquiat fue un hombre cuya vida desesperada le llevó a plasmar en grafitis su lucha en contra de las estructuras preestablecidas. Su pintura está llena de poesía, esa poesía es la que me gustaría contemplar en mi casa.
Ejerza de crítico de la última exposición que ha visitado.
Tengo un cuadro delante. Es un bosque de ramas negras, todas, excepto una de color rojo. Es un cuadro irreal que finalmente se convierte en un realismo desnudo por un capricho del autor...
¿Le importa la crítica? ¿Le sirve para algo?
Sí, sirve para cabrearte y para saber que sí te importa.
¿Qué música escucha en casa?
Música cubana.
¿Recuerda la película que más veces ha visto?
El Rey León en dibujos con mis hijos.
¿Qué obra de teatro debe ver urgentemente el presidente del Gobierno?
Autobiografía de un yogui, aunque no sé si sabría descifrar los códigos para encontrar respuestas.
¿Le gusta España? Denos sus razones.
Me encanta España porque aquí he nacido. Este es mi país, el lugar donde transcurre mi vida, donde sé que estoy en casa.
Regálenos una idea para mejorar la situación cultural de nuestro país.
Pensar que el que opina de forma contraria a la nuestra, igual tiene también su punto de razón.