Richard Hamilton. Foto: Alberto Di Lolli.
A sus 89 años, con la edad que ha fallecido a primera hora de esta mañana, más que el padre del Pop Art, Richard Hamilton (Londres, 1922) bromeaba diciendo que él se sentía más bien "el abuelo". Aunque su espíritu le hacía trabajar como cuando tenía 34, cuando uno de sus collages, ¿Qué es exactamente lo que hace a los hogares de hoy tan diferentes, tan atractivos? (1956) se convertía en el paradigma de un nuevo Pop Art que nacía en Reino Unido.Lo presentó por primera vez en la exposición This is Tomorrow, en la Witechapel Art Gallery de Londres y el título de la exposición vaticinó pronto su futuro. Se convirtió en el máximo impulsor en Inglaterra de este nuevo arte nacido de lo urbano, provocador, cargado de humor, colores chillones. También barato, ingenioso que abogaba por la producción en serie, la cultura de masas y lo efímero. Era uno de sus gritos de guerra en el arte. Sólo dos años antes, el crítico británico Lawrence Alloway había dado el nombre de Pop Art a este tipo de arte creado de la publicidad, los carteles, las revistas, los cómics y el diseño industrial.
Aunque Hamilton no sólo fue una figura clave del Pop Art inglés. También fue uno de los primeros en plantearse la exposición como una obra en sí misma, en ser comisario de exposiciones cuando este concepto aún no existía. Fue grabador, teórico y diseñador. De sus manos nació el famoso Album blanco de The Beatles, en 1968, o los principales estudios sobre Duchamp, a quien admiraba, decía, por su "energía mental". Hoy disco y libros son también referentes culturales.
Hamilton había declarado recientemente, en el último de sus viajes a España, que su exposición en el Museo del Prado había sido "un sueño imposible, como si estuviera entrando en la Historia". Sentía fascinación por Las Meninas de Velázquez y repetía a menudo que nunca vio obra igual: "Me sentí sobrecogido la primera vez que lo vi y ya nunca me he desprendido de Las Meninas. Cada vez que la contemplo la experiencia es nueva y más impresionante. Todo en este cuadro es preciso y definido; y la composición es apasionante. Me fascinan los interiores y éste es el gran interior de la Historia del Arte. Este cuadro es como una necesidad", afirmó.
Él tuvo la necesidad de pintarlas en repetidas ocasiones, como vimos en su paso por el propio Museo del Prado la pasada primavera. La exposición mostraba las diferentes fases de ejecución del aguafuerte Las meninas de Richard Hamilton (Picasso's Meninas) con los que homenajeaba a Velázquez y Picasso al mismo tiempo y que se exponían en Madrid entre las obras de Velázquez y Goya.
Desde que empezara con su primera individual en la galería Leo Castelli de Nueva York hasta la gran retrospectiva que preparaba para 2013 en Los Ángeles, Filadelfia, Londres y Madrid, Hamilton pasó por representaciones en bienales, importantes exposiciones colectivas y destacadas exposiciones individuales, como la que tuvo lugar en el MACBA, en Barcelona, en el Pompidou de París y más recientemente, en 2010, en la Serpentine Gallery de Londres y la galería Juana de Aizpuru de Madrid.