Maqueta del nuevo Museo de Arquitectura y Diseño.

El número 30 del Paseo del Prado albergará el Museo del Arte, Arquitectura, Diseño y Urbanismo, (MAADU) impulsado por el argentino Emilio Ambasz, cuya fundación aportará 10 millones de euros para hacer realidad este proyecto, caracterizado por revestir las fachadas de un jardín vertical gracias a cientos de macetas, al igual que el techo, lo que reducirá el calor dentro del edificio y absorberá el agua de la lluvia.



El pionero de la arquitectura verde y la alcaldesa de Madrid, Ana Botella, han firmado este miércoles el convenio de colaboración, por el que el Consistorio cede el inmueble por 75 años para fines culturales mientras que la Fundación Ambasz se hace cargo de la construcción y mantenimiento por un montante de 10 millones de euros. Este nuevo museo contará con una colección permanente de arte, arquitectura y urbanismo "revolucionario y sostenible", además de exposiciones temporales y conferencias.



El edificio de Paseo del Prado, 30, actualmente sin uso, estaba incluido en el lote de inmuebles que el Ayuntamiento puso a la venta. El arquitecto se interesó por él y le escribió una carta a Botella. La decisión municipal fue sacarlo de ese catálogo para dar cabida al museo teniendo en cuenta la ubicación estratégica, en pleno Paseo del Arte, y potenciar el entorno desde el punto de vista cultural, turístico e internacional.



Todo ello ha derivado en la firma del convenio, por el que el Museo del Arte, Arquitectura, Diseño y Urbanismo llegará a Madrid, desbancando a otras ciudades candidatas, como Nueva York, Buenos Aires, Bolonia o Zurich. Ambasz traerá a la capital su apuesta por conectar la arquitectura con la naturaleza. "Es posible tener el verde en la ciudad, el verde sobre el gris", ha declarado este miércoles desde el Palacio de Cibeles.



En este punto, el arquitecto ha querido diferenciar su proyecto del jardín vertical de CaixaForum apuntando que este último sigue la tradición francesa, es decir, un jardín para ser admirado, mientras que el suyo se desmarca y va hacia una instalación muy fácil de mantener al estar compuesta por plantas, cada una en una maceta, invisibles desde la calle. Si una enferma, se cambia la maceta con la planta. Sus paredes vegetales no dejarán pasar los rayos ultravioleta, nada indicados para las obras que albergará.



El arquitecto ha explicado que, por dentro, el inmueble se encuentra en un estado "lamentable", sin salidas de emergencias, con demasiadas escaleras y recubierto de amianto. Optará por 'hacerlo' de nuevo y no restaurarlo cubriéndolo con dos fachadas verdes, con lo que será muy fácil recordarlo. El último piso, recubierto también por un techo vegetal, albergará un restaurante con unas vistas inmejorables de Madrid.



Sus 3.600 metros se distribuirán en cinco plantas -más que en la actualidad-. Una vez conseguida las necesarias autorizaciones municipales, el arquitecto cree que la obra podría estar terminada en "no más de dos años" ya que la construcción "es bastante simple".



El argentino ha explicado que traerá su proyecto a Madrid porque siente el "deber" de hacerlo después de haber sido nombrado ciudadano español pero, sobre todo, por "sentido de la justicia". "Quiero que los españoles tengan confianza en sí mismos. Hay una crisis pero se va a pasar, las cosas cambian", ha destacado.



También ha añadido que desembarcará en la capital española porque este tipo de arquitectura que promueve "lamentablemente" no es muy frecuente en España, a diferencia de lo que pasa en Estados Unidos, donde "hay mucha gente" que apuesta por ella.



Por su parte, la alcaldesa, ha subrayado que España tendrá su primer Museo de Arte, Arquitectura, Diseño y Urbanismo en el Paseo del Arte gracias a la colaboración entre Ayuntamiento y Comunidad y a la "generosidad" de Ambasz, cuya fundación se hará cargo íntegramente del diseño, la construcción y el funcionamiento durante la concesión. Además, el arquitecto creará un programa de becas de excelencia para que los estudiantes de Arte mejoren su formación en la ciudad.



Botella ha expuesto que se ha llegado al convenio de colaboración en un tiempo "razonable y rápido". "Tenemos que facilitar ahora más que nunca todo lo necesario a aquellos que quieran venir a la ciudad con cualquier inversión o con algo tan emblemático como este museo", ha razonado la alcaldesa.



Asimismo, la primera edil ha puesto el acento en que este proyecto "fortalecerá el eje Prado-Recoletos" con el impulso de Ayuntamiento y Comunidad, palabras que ha pronunciado ante el consejero de Medio Ambiente, Borja Sarasola.