Mercedes Basso, Leopoldo Rodés y María Dolores Jiménez-Blanco

La Fundación Arte y Mecenazgo presenta, con el impulso de La Caixa, 'El coleccionismo de arte en España. Una aproximación desde su historia y su contexto', un documento que analiza las razones de la escasa tradición del colecci

El presidente de la Fundación Arte y Mecenazgo, Leopoldo Rodés, presenta El coleccionismo de arte en España. Una aproximación desde su historia y su contexto, junto a su autora, María Dolores Jiménez-Blanco, profesora de Historia del Arte de la Universidad Complutense de Madrid.



Se trata del segundo estudio promovido por la Fundación Arte y Mecenazgo que impulsa La Caixa para el estímulo y divulgación del coleccionismo de arte como fuente de mecenazgo de la cultura. El estudio, inédito por su amplio enfoque, profundiza en la escasa tradición del coleccionismo privado que se da en nuestro país, detallando los factores históricos que lo explican desde el Siglo de Oro hasta la actualidad.

La Fundación tiene como misión estimular y divulgar el conocimiento del coleccionismo de arte, y fomentarlo como fuente de mecenazgo. El papel de la entidad ha adquirido especial relevancia en el contexto actual, con un debate creciente sobre el papel del mecenazgo y la necesidad de cambiar el modelo actual.



Remontándose hasta el siglo XVI, el segundo Cuaderno Arte y Mecenazgo detalla la evolución del coleccionismo público y privado y cómo, en el siglo XIX, se produce una interrupción de la tradición coleccionista que no revierte hasta la llegada de la transición democrática. También se analiza el auge vivido por el coleccionismo público a partir de la década de los ochenta y la institucionalización del arte contemporáneo, una situación de aparente normalización que la crisis económica pone en entredicho.



El coleccionismo de arte en España radiografía la frágil situación de los actuales coleccionistas privados, que siguen siendo pocos y poco reconocidos públicamente. En este sentido, la Fundación Arte y Mecenazgo ha llevado a cabo en los dos últimos años una profunda labor de investigación sobre la situación del coleccionismo como fuente de mecenazgo en España. El resultado es un amplio y profundo conocimiento nunca antes alcanzado.



La falta de tradición del coleccionismo en nuestro país motiva profundizar en el estudio sobre la historia del coleccionismo que ahora se presenta. Este diagnóstico es asimismo el punto de partida para determinar las acciones de la entidad (con la organización de los Premios Arte y Mecenazgo, ciclos de conferencias, etc.), centrada en proporcionar información sobre la realidad (hablar de coleccionismo, estudiar el sector y su regulación, señalar la excelencia) para generar el conocimiento que permitirá el reconocimiento social de este mecenas.



Además la regulación es dispersa, descoordinada y no responde a las necesidades actuales. El año pasado, la entidad presentó su primer estudio, El mercado español del arte en 2012, que alertaba sobre la contracción del mercado del arte en los últimos años y sobre la ausencia de dinamismo del sector.



Asimismo, la Fundación identificó la necesidad de reformar la estructura fiscal y regulatoria que determina y rige el sector, elaborando una propuesta de medidas de fomento, impulso y desarrollo del arte y el mecenazgo en España.



Los dos factores citados han repercutido en el escaso desarrollo del fenómeno del coleccionismo y en la precariedad de su contexto -el mercado del arte-, circunstancia que, a su vez, desincentiva el coleccionismo, convirtiéndose en una especie de círculo vicioso.

Interiores: notas sobre el coleccionismo particular en España, hoy

Reconociendo los cambios registrados en los últimos años tanto en el perfil del coleccionista como en el de las colecciones, esta aproximación señala que el coleccionismo de arte en España sigue teniendo mucho de reto, del mismo modo que sigue pendiente la sensibilización real de la sociedad por el arte.



Los coleccionistas españoles son pocos, y aún son menos los que se conocen públicamente. La dificultad para acceder a este agente del llamado sistema del arte es, a su vez, uno de los síntomas más reveladores de su situación. Pero hay que destacar que en las colecciones de arte llevadas a cabo por particulares en los últimos tiempos asoman nuevos valores: unen pasión, proyecto intelectual en algunos casos desarrollado muy profesionalmente, deseo de compartir e implicación. Las recientes intervenciones públicas de algunos coleccionistas españoles apuntan a una noción del coleccionista con mayor peso de lo racional. Además de la apertura de las colecciones al público o la contribución a la vida de las instituciones culturales, esta proyección incluye en la actualidad aspectos como la formación del público y el apoyo a los creadores.



En el último medio siglo, el perfil humano del coleccionista español ha evolucionado, así como el contenido de las colecciones. En los ochenta surge una nueva generación de coleccionistas, coincidiendo con un ciclo expansivo que se percibe como salto a la modernidad y homologación internacional.