Con la firma todavía sobre la mesa de los nuevos estatutos que rigen el Museo y que permiten al Reina Sofía mayor autonomía y, sobre todo, dar cabida a nuevos nombres en su Patronato (hay ya siete nuevos patronos corporativos y aún llegará alguno más), pues bien, con estas novedades aún bajo el brazo ha presentado el director Manuel Borja-Villel el balance de 2013 y las exposiciones más destacadas del próximo año, con la idea del juego sobrevolándolo todo.



Pero vamos primero con las cifras. Con la autonomía aumenta también la autofinanciación, casi obligatoria cuando el Estado ha reducido su aportación total que todavía es muy alta, de algo más del 75 por ciento (más de 25 millones de euros) en 2013. Es decir que el Reina Sofía ha logrado ingresar 8,4 millones de su presupuesto anual que ascendió este año a 33.786.670 euros. Se espera que en 2014 aumente esta cifra de modo que los ingresos propios supongan un 30 por ciento y las transferencias estatales se reduzcan al 69 por ciento. El presupuesto total será en el próximo ejercicio de 33.236.670 euros.



Aún así, insiste Borja-Villel, la calidad no ha disminuido y el visitante no percibe que el Museo cuenta con casi 12 millones menos que en 2011. Es más, si miramos los gráficos de visitantes la curva es inversa a la del presupuesto. De los 2 millones de personas que pasaron por el Reina Sofía en 2009, 2013 se cerrará con 3,2 millones. "Dalí ha tenido mucho que ver, por supuesto, pero no ha sido lo único. Ya antes de esta exposición, las de Cristina Iglesias y la Colección de Patricia Phelp de Cisneros funcionaron muy bien de cara a la taquilla".





Los placeres del ocio, de Fernand Leger.





El trabajo en red sigue marcando las colaboraciones de la institución con los museos y centros extranjeros y, dentro de esta línea de actuación, cobra importancia la puesta en marcha de L'Internationale, ese grupo formado con otros cinco museos europeos que, como el Reina Sofía, trabajan "desde la periferia": Moderna galerija de Ljubljana (Eslovenia), MACBA de Barcelona, Van Abbemuseum de Eindhoven (Holanda), Museum van Hededaagse Kunst de Amberes (Bélgica) y Salt de Estambul. El grupo, promovido por el Reina Sofía, recibirá 2 millones de euros de la Unión Europea para desarrollar propuestas de investigación, exposiciones y seminario hasta 2017. Un proyecto que completa la internacionalización del centro que ya colabora en exposiciones concretas con museos como la Tate de Londres, el Jeu de Paume de París o el Museo Serralves de Oporto.



Y a nivel expositivo la "línea de fuerza" es la idea de educación, de playground, de "la calle como lugar de juego y el juego como creación", recorre muchas de las exposiciones que vamos a ver en el Reina Sofía en 2014. En este sentido la muestra central llegará en abril del próximo año bajo el título precisamente de Playgrounds. Un recorrido por el arte moderno desde el siglo XIX hasta la actualidad, desde Goya a Giacometti o Xabier Rivas. 300 obras de diversos formatos con el espacio de juego como eje vertebrador.



A esto se unen exposiciones individuales que ponen sobre la mesa la "obsesión por lo contemporáneo y por la hiperactividad del espectador, como la muestra de Dominique González-Foerster en el Palacio de Cristal (13 de marzo)", ha explicado el director. No faltarán tampoco las figuras clave en el arte del siglo XX, como Richard Hamilton (en junio) Hanne Darboven (a finales de marzo), Cardiff y Miller (octubre) o la dedicada al cineasta Amos Gitai (en febrero).